Dice que estaba preocupado por no tener la atención de salud que necesitaba
Jorge Balmaceda explica que en una última carta que le envió el ex director de la CNI, le manifiesta la preocupación que tendría la eventual reubicación de los 10 reclusos condenados en el penal Cordillera, porque “le significaba a él un menoscabo moral, físico y psicológico bastante grande».
El abogado del general (R) Odlanier Mena, Jorge Balmaceda, aseguró este sábado que el suicidio de su representado fue gatillado por el traslado de los 10 reos condenados por violaciones a los derechos humanos desde el penal Cordillera hasta Punta Peuco.
En conversación con Canal 24 Horas, Balmaceda dijo que «el general Mena se suicidó anoche en su casa como resultado del traslado de ellos a Punta Peuco», afirmando que «se encontraba en un situación de salud muy delicada».
Además, señaló que su cliente le confesó que la situación del traslado, luego de la decisión tomada por el Presidente Sebastián Piñera, le afectaba mucho, debido a que «su traslado significaba que no pudiera tener la atención de salud que necesitaba».
«Eso lo demuestra la última carta que él me mandó, con la preocupación que él tendría por el eventual traslado que le significaba a él un menoscabo moral, físico y psicológico bastante grande», sostuvo.
Balmaceda también mencionó que continuará con la defensa del brigadier (R) Pedro Espinoza, quien también se encuentra recluido en la cárcel Cordillera, precisando que «el peligro que encierra para su vida es realmente latente y eso no lo ha querido considerar ni el gobierno ni muchos políticos».
En tanto, la dirigente de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos (AFDD), Mireya García, dijo que el suicidio de Mena fue para frenar el traslado de reclusos a Punta Peuco, entonces fue “una decisión irracional”.
«Fue una decisión absolutamente personal (adoptada) tal vez en una situación de gran rebeldía y poca estabilidad emocional», declaró García a los periodistas a las puertas del Penal Cordillera, adonde acudió para manifestar su apoyo al cierre del Penal Cordillera, decisión anunciada el pasado jueves por Piñera.
«Él (Mena) podría haber sobrevivido perfectamente en el penal de Punta Peuco, porque también (es un penal que) tiene condiciones privilegiadas», señaló García.
Punta Peuco iba a ser la nueva prisión para Odlanier Mena y otros nueve represores de la dictadura militar, tras la decisión del presidente Piñera de cerrar el Penal Cordillera, donde los reclusos gozan de una serie de privilegios que han generado un hondo rechazo social.
Entre los que serán traslados figura el ex jefe de la DINA, Manuel Contreras, considerado el responsable directo de la represión llevada a cabo durante los primeros años del régimen militar y con quien Odlanier Mena mantenía profundas diferencias.
La decisión de cerrar el Penal Cordillera y trasladar a sus reclusos se produjo días después de que Contreras concediera varias entrevistas televisivas que mostraron los exclusivos privilegios de que gozaban los internos de ese recinto penitenciario.
En las entrevistas, Contreras negó la existencia de los detenidos desaparecidos y su responsabilidad en la muerte de opositores a la dictadura, algo que, según dijo hoy Mireya García, de la AFDD, «es una afrenta para las víctimas, una burla».
«Si creemos que el principal criminal de nuestro país no tiene ninguna responsabilidad, entonces abramos todas las cárceles de Chile, porque todos los que están ahí han cometido delitos menos graves que él», añadió.
La vicepresidenta de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos destacó la decisión tomada por el presidente Piñera, que calificó de «hecho histórico», al tiempo que pidió un «compromiso efectivo y sin dobleces respecto a los derechos humanos».
