“Ante una posibilidad no ficticia de victoria del Movimiento Gremial, resulta primordial que ante tal situación –que podría abrir espacio para intentos de división y/o freno para el avance del movimiento estudiantil– podamos seguir situándonos por delante de nuestras diferencias, y comprender la necesidad de evitar cualquier desenlace eleccionario que pueda poner en riesgo no sólo la participación protagónica de la UC sino que, sobre todo, el despliegue y continuidad política del movimiento estudiantil para el próximo año”, sostienen.
Los próximos martes y miércoles se realizará la segunda vuelta de las elecciones de la Federación de Estudiantes de la Universidad Católica, oportunidad en que se enfrentarán la lista Gremialista 1ª y la de la Nueva Acción Universitaria (NAU).
El recuento de votos en primera vuelta arrojó como resultado en primer lugar a la lista del gremialismo que encabeza Andrés Justiniano con el 25,15% de las preferencias, seguida por la opción que lleva a Naschla Aburman del NAU con el 22,66% de las opciones.
Ante el apretado escenario que enfrentan las elecciones de la Feuc, varios ex dirigentes del organismo estudiantil enviaron una carta de apoyo a la lista del NAU, entre los que figuran Cristóbal Cortés, ex candidato a Consejero Superior 2010, Crecer UC; Francisco Jeria, ex candidato a presidente FEUC 2010, Opción Independiente (OI); Claudio Castro, presidente FEUC 2006, Opción Independiente (OI); Francisco Meneses, ex candidato a Consejero Superior 2006, Opción Independiente (OI); Luis Thielemann, ex Candidato a Consejero Superior 2006, La SurDa; Gonzalo Layseca, secretario general FEUC 2005, MRU UC; Jenny Monsalve, secretaria ejecutiva FEUC 2005, MRU UC; Alexis Cortés, Consejero Ejecutivo 2004, JJCC y Álvaro Ramis, presidente FEUC por el Frente de Estudiantes de Izquierda (FEI) 1998.
La misiva precisa en una de sus partes que “el modelo educacional chileno se ha cuestionado en sus cimientos y la movilización social que ha impulsado el movimiento estudiantil ha llevado adelante esta crítica. Proceso en el cual hemos entendido que para que nuestras propuestas se concreten, la única garantía que tenemos es nuestra propia fuerza y proyección política”.
“En ese contexto, sabemos que el próximo año el escenario será complejo. El movimiento estudiantil deberá enfrentarse a los intentos de cierre político del conflicto educacional desde el ejecutivo y el parlamento, espacios desde los cuales se apostará por monopolizar la discusión y la agencia política, excluyendo –por ende– al movimiento estudiantil y al resto de actores de la educación, con tal de favorecer un acuerdo más cómodo para la vieja política”, explica.
La carta agrega que “se requiere, por tanto, un movimiento estudiantil que en unidad logre forjar una posición de fuerza que le permita mantener protagonismo en la discusión educacional, evitando la delegación de las soluciones en los actores políticos tradicionales. Para ello, resulta indispensable que los estudiantes de la UC puedan mantener los niveles de compromiso que han demostrado a lo largo de estos años, acompañados de una Federación que, independiente de las críticas que podamos tener frente a lo que han sido sus distintas conducciones, pueda significar un aporte y respaldo en la dirección antes señalada”.
“Por todo lo anterior es que creemos que frente al escenario que plantea la segunda vuelta de las elecciones de Federación de la Universidad Católica (FEUC), y ante una posibilidad no ficticia de victoria del Movimiento Gremial, resulta primordial que ante tal situación –que podría abrir espacio para intentos de división y/o freno para el avance del movimiento estudiantil– podamos seguir situándonos por delante de nuestras diferencias, y comprender la necesidad de evitar cualquier desenlace eleccionario que pueda poner en riesgo no sólo la participación protagónica de la UC sino que, sobre todo, el despliegue y continuidad política del movimiento estudiantil para el próximo año”, sostienen.
