Así lo reveló la defensa del notario Roberto Mosquera. La Corte de Apelaciones abrió un cuaderno de remoción al ministro de fe y a su par Gloria Acharán, quien validó la candidatura de Jocelyn-Holt.
En el marco del llamado «Caso Firmas», la defensa del notario Roberto Mosquera alegó ayer ante el Pleno de la Corte de Apelaciones que el 73% de las 51 mil firmas presentadas por la candidatura presidencial independiente de Franco Parisi se habría certificado con un timbre falso y con una rúbrica que suplantaba la del ministro de fe.
Según consignó El Mercurio, el abogado Vivian Bullemore aseguró que 37.892 se certificaron con un timbre falso, de las 45.595 que fueron presentadas ante el Servel como validadas por Mosquera.
De esas casi 38 mil firmas, el notario sólo reconoce 7.653 firmas autorizadas por él, del resto «no sabe cómo se certificaron». «No le constan al notario. Entonces, lo que pasó es que alguien le falsificó la firma y alguien le sustrajo el timbre a la notaría», declaró Bullemore.
De acuerdo a la versión de la defensa, varias de estas autorizaciones con supuesto timbre falso se realizaron en días festivos, cuando «no se habilita la notaría».
Por su parte, el abogado de Franco Parisi, Mauricio Daza, anunció que solicitará en el Ministerio Público un peritaje para determinar si efectivamente el timbre es falso.
«Todo indica que tanto el notario Mosquera como su empleado, Erwin de la Fuente, estafaron a la candidatura de Franco Parisi, ya que ellos cobraron una suma millonaria por autorizar las firmas de sus adherentes, pero ahora aparecen diciendo que la firma del notario y sus timbres serían falsos», sostuvo.
Agregando que «todas las irregularidades que se habrían cometido en relación con la autorización de firmas de adherentes se realizaron al interior de la notaría del señor Mosquera, con su participación directa y la de su empleado de confianza».
En tanto, el abogado defensor de la abogada Gloria Acharán, Claudio Pavlic, alegó que el artículo 13 de la Ley 18.700 sobre elecciones populares y escrutinios no exige la presencia del notario en la autorización de firmas de instrumentos privados, «puede ser ante él o ante un funcionario de la notaría».
«Ante notario no puede ser entendido como exigencia de presencialidad, porque es exactamente la misma expresión que la ley utiliza cuando exige que diversos tipos de instrumentos privados tengan la firma autorizada por un notario», insistió.
