Desvinculaciones se produjeron el pasado 11 de abril
El plantel señala que los despidos se ejecutaron debido a la baja en la matrícula que experimentó este año luego de perder la acreditación de la CNA. En reunión con académicos y funcionarios, la nueva rectora del plantel, Pilar Armanet, justificó las polémicas en que se ha visto envuelta la casa de estudios, asegurando que “están haciendo zumbar a las privadas porque estas le están quitando la tajada del león a las estatales”.
Luego que la Comisión Nacional de Acreditación decidiera dejar sin acreditación al plantel controlado por el grupo Laureate, la UDLA despidió de sus funciones a más de 100 trabajadores. El pasado 11 de abril la medida se dio a conocer de forma interna a través de un comunicado.
Según explican fuentes internas de la universidad, “se cerraron departamentos completos, como los de telemarketing y seguridad interna. En cobranzas, de 10 trabajadores, quedaron dos”.
La UDLA justifica los despidos señalando que “los nuevos estudiantes no podrán hacer uso del CAE ni de becas estatales hasta que la universidad vuelva a acreditarse en dos años más. Esto implica que la matrícula de los alumnos nuevos de la universidad ha visto una importante merma respecto de años anteriores”.
A través de un comunicado enviado a El Mostrador, la universidad agrega que “ante el impacto de la menor matrícula, la universidad ha hecho su máximo esfuerzo por evitar que las modificaciones administrativas afecten a la comunidad, realizando un exhaustivo ajuste en todos sus gastos operativos”, comenta la universidad que cuenta con la segunda mayor matrícula en el país, superando los 30 mil estudiantes.
Respecto a su relación con el grupo Laureate, la UDLA asegura que ha recibido un importante apoyo de su grupo controlador: “La universidad ha recibido un significativo respaldo de sus miembros activos (Laureate) y ha diseñado importantes eficiencias operacionales y de infraestructura para reducir sus gastos. Lamentablemente, como parte de la implementación de este plan, se ha hecho inevitable la desvinculación de algunos colaboradores a quienes se les ha comunicado esta medida el día de hoy (viernes 11) a través de los canales establecidos y bajo las políticas institucionales, con total apego a la legislación laboral”, asevera.
En total, los trabajadores despedidos llegaron a 130 en todo el país.
Según comentan en la universidad, hasta ahora se han cumplido todas las obligaciones contraídas con los trabajadores despedidos, por lo que no han existido mayores reclamos por la medida. “Todo se hizo en regla”, asegura un académico.
“LA TAJADA DEL LEÓN”
En una reunión realizada este lunes 28 de abril en el auditórium de la sede Providencia, la nueva rectora Pilar Armanet presentó su proyecto frente a académicos y funcionarios. En la ocasión, aseguró que en el país existe una animadversión hacia las universidades privadas.
“Están haciendo zumbar a las privadas porque estas le están quitando la tajada del león a las estatales”, aseguró Armanet, quien defendió la labor de las universidades privadas y culpó a los planteles tradicionales de la supuesta mala imagen que hoy padecen. De hecho, hizo referencia a la pérdida de fondos por parte de las estatales durante la administración de Sebastián Piñera.
Sobre su proyecto educativo, aseguró que desde ahora en la UDLA se fomentarán los centros de alumnos, para “crear comunidad”, y que se pondrá énfasis en la admisión, mejorando “cualitativamente” el ingreso.
Los masivos despidos en la universidad se dan en el contexto de la crisis que vive el plantel por la pérdida de la acreditación y por las investigaciones por lucro que pesan sobre ella. Actualmente, la Fiscalía, el Servicio de Impuestos Internos y el Ministerio de Educación indagan los millonarios traspasos que la UDLA y las otras instituciones de educación superior dependientes de Laureate (Universidad Andrés Bello y Universidad de Viña del Mar), han realizado a ese grupo en los últimos años, los que superan los US$80 millones.
