Su defensa ya pidió que la causa se traslade a otro tribunal y hasta ahora ha ejercido su derecho a guardar silencio al momento de presentarse en la Fiscalía. Pero el diseño del ex senador incluye defender hasta el final que ni él ni los políticos involucrados cometieron un delito al entregar facturas a cambio de ayudas económicas para sus campañas y en cambio sí lo hicieron los empresarios.
El ex senador de la UDI e histórico dirigente del partido, está involucrado en la investigación por fraude tributario que el Ministerio Público sigue contra los dueños de las empresas Penta. Carlos Eugenio Lavín y Carlos Alberto Délano, declararon en la Fiscalía que entregaron apoyo económico a los candidatos gremialistas a través de Novoa, específicamente de la sociedad Inversiones y Mandatos, que según admitieron «no prestó ningún servicio para Penta»
Para abordar este frente judicial, Novoa es asesorado por los abogados Miguel Alex Schweitzer, Matías Balmaceda y Francisco Cox.
Según informa La Segunda, Jovino Novoa optará por demostrar hasta el final que no cometió ningún delito, tampoco los políticos que entregaron boletas a cambio de dinero para sus campañas y que las conductas delictuales vinieron en cambio desde los empresarios, como Pablo Wagner. En esa línea Novoa mantiene también el contacto con la directiva del partido que encabeza Ernesto Silva y en la que mantiene su influencia, amparándose en el argumento de que las conductas investigadas por la Fiscalía se hicieron en el marco del beneficio para el partido, ya que no iba a la reelección, y no para su patrimonio personal, como en el caso del ex subsecretario de Minería.
Otro punto de la estrategia es que a pesar de haber ido a las citaciones de la Fiscalía, el ex Presidente de la UDI no ha entregado todavía su testimonio. A diferencia de Délano y Lavín que hablaron largamente en la Fiscalía, Novoa primero ha hecho uso de su derecho a guardar silencio y hace poco su defensa decidió pedir que se declare incompetente al 8° Juzgado de Garantía para resolver el caso. En este sentido, solicita que la causa sea vista en el 4° Juzgado, donde quedaría separada de la investigación matriz, que es el fraude al FUT.
Por último, las penas a las que se expone el ex senador son bajas. Aunque el delito tributario contempla el pago de una multa y las penas van desde 541 días hasta los 5 años de cárcel, en el caso del histórico dirigente de la UDI, su “irreprochable conducta anterior» es una poderosa atenuante.
