Hija de Adolfo Zaldívar, fallecido ex parlamentario y embajador
Como directora de la Fundación para la Familia trabajó con él y admitió como opinión personal que ella «habría hablado antes, el primer día» y le aconsejó elegir bien a sus amigos «porque alguien podría acercarse por interés» y por último destacó su trabajo en una repartición que antes era «la entretención de las primeras damas»
Ana María Zaldívar, hija del fallecido ex parlamentario y embajador Adolfo Zaldívar, es la directora de la Fundación para la Familia, una de las siete organizaciones que estaban a cargo del hijo de la Presidenta Michelle Bachelet, Sebastián Dávalos, durante los once meses que estuvo a cargo de la Dirección Sociocultural de la Presidencia, cargo que debió dejar en medio del escándalo por el crédito otorgado a la pyme de su esposa, Natalia Compagnon.
Zaldívar, aunque aclaró que «no me voy a pronunciar sobre lo que pasó», admitió a La Segunda que «yo habría hablado antes, el primer día». Además confirmó que mientras duró la crisis no mantuvieron contacto con Dávalos.
Asimismo, dedicó elogios para el hijo mayor de la Presidenta y su trabajo. «Lamento harto todo lo que ha pasado, porque él estaba haciendo una muy buena gestión. Reactivó las fundaciones y las alineó con el programa de gobierno. Antes de él, funcionaban bastante autónomamente del gobierno de turno. Eran como la entretención de las primeras damas», dijo.
En esa línea agregó que, a su juicio, Dávalos es una persona «muy cálida de muy buen trato (..) es muy reservado, hay que conocerlo. Es muy cálido y tímido», afirmó y le envió un consejo, «es hijo de la Presidenta y por eso debe tener cuidado en elegir a sus amigos. Podría haber alguien que se acerque por interés, por ejemplo»,
Finalmente, sobre las denuncias de la oposición para determinar si hubo tráfico de influencias o uso de información privilegiada, Zaldívar dijo que «eso es puro show. Pero si hay que investigar, que se investigue. Está bien que haya transparencia. Pero hasta donde yo sé, por lo que he leído en los medios, no hay nada ilícito», concluyó.
