Declaró en el marco del caso Penta-SQM
El director ejecutivo de Chilevisión fue citado por la Fiscalía Nacional por la emisión de tres facturas por un total de $45 millones que emitió su empresa Inversiones La Música Limitada a Soquimich, las cuales fueron mencionadas en la denuncia que hizo el Servicio de Impuestos Internos (SII), como antecedentes contables que no tendrían la documentación de respaldo que justificaran dichos pagos.
Tres horas y media estuvo el director ejecutivo de Chilevisión, Jaime de Aguirre, prestando declaración ante los fiscales que investigan el caso Penta-SQM, a quienes les relató la forma en que Bancard le canceló parte de sus honorarios a través de otras empresas.
De Aguirre llegó hasta las dependencias de la Fiscalía Nacional tras ser citado por la emisión de tres facturas por un total de $45 millones que emitió su empresa Inversiones La Música Limitada a Soquimich, las cuales fueron citadas en la denuncia que hizo el Servicio de Impuestos Internos (SII) como antecedentes contables que no tendrían la documentación de respaldo que justificaran dichos pagos.
De acuerdo a lo que consigna La Tercera, el ejecutivo de Chilevisión hizo un pormenorizado detalle de la forma en cómo su empleador, Bancard, le canceló en esa oportunidad parte de sus honorarios como director del canal.
Según la versión, De Aguirre le llevó al equipo de fiscales un documento en donde se acreditaría que Bancard le solicitó emitir boletas a distintas empresas como una forma de cancelarle a él un pago de $130 millones.
Además, el texto entregado por el ejecutivo, que no se trata de correo electrónico, detalla que el director ejecutivo del canal debía realizar tres facturas a SQM por $45 millones en total, tres boletas a Aguas Andinas por $10 millones en total, una factura a Asesorías e Inversiones Ilihue Ltda., ligada a José Cox, por $20 millones, y otros dos comprobantes, uno para Bancard y otro para Pampa Calichera.
En cuanto a Inversiones Ilihue, Cox es uno de los mejores amigos y socios de mayor confianza del ex Presidente Sebastián Piñera, e integró el denominado “Tercer Piso” de La Moneda, compuesto por empresarios a quienes el Mandatario consultaba informalmente sobre distintos asuntos de Estado. Son amigos desde su época de estudiantes en la Universidad Católica, cuando Cox era compañero en ingeniería comercial de su hermano Pablo.
Durante su cita con los fiscales, De Aguirre les entregó las cartolas bancarias donde se estipulan los ingresos de los montos y el detalle sucesivo de los giros efectuados desde su cuenta, con el objetivo de descartar su uso en campañas políticas y acreditar que fueron destinados a su uso personal.
La nota señala que el ejecutivo de Chilevisión fue consultado sobre por qué aceptó una manera irregular de recibir sus honorarios, a lo que habría respondido que no tenía razones para dudar de su empleador Bancard.
Además, fuentes citadas por el medio indican que, al ser requerido el nombre de quién le pidió ocupar esa modalidad de pago, habría asegurado que había sido desde Bancard, y al ser consultado sobre si era el ex Presidente Sebastián Piñera quien estuvo detrás de ese requerimiento, este habría afirmado que el ex Mandatario no había sido.
En tanto, el ex jefe de Estado trató de explicar la extraña relación comercial, asegurando que los pagos asociados a SQM y al director de CHV no tienen relación con bonos de desempeño sino que son parte de un contrato que data desde 2005 para ejecutar asesorías comerciales, como la compra de los terrenos de la ex fábrica Machasa.
A su salida, De Aguirre manifestó que «respondimos un llamado del fiscal, di las declaraciones como corresponde y acordamos con el fiscal de no hacer grandes comentarios, porque se está desarrollando la investigación. Eso es básicamente».
Su abogado, Juan Pablo Hermosilla, dijo que su representado «fue requerido para entregar cierta información en relación con determinadas facturas que se le solicitaron, y eso fue lo que él ha realizado».
Hermosilla también señaló que el director ejecutivo del canal no hizo uso de su derecho de guardar silencio y «ha contestado el total de los requerimientos. El fiscal nos pide que no entreguemos el detalle de los temas».
