El director de Fonoaudiología de la Universidad Bernardo O’Higgins, Francisco Sánchez, explicó que en el momento de “alentar” a un equipo de futbol las cuerdas vocales se exponen a una “disfonía” y si a eso se suma el consumo de alcohol y tabaco, el daño puede aumentar en forma sustantiva.
A pesar de lo impopular que pueda ser una recomendación como esta en tiempos de Copa América, especialistas de la voz están pidiendo a los hinchas del fútbol evitar gritar ¡¡¡Goool!! para que las cuerdas vocales no sufran una «disfonía».
El director de Fonoaudiología de la Universidad Bernardo O’Higgins, Francisco Sánchez, indicó que resulta fundamental que los hinchas de la «Roja» sepan a lo que se enfrentan al momento de expresar su alegría con la marcación de un tanto.
Explicó que en el momento de “alentar” a un equipo de futbol o gritar un “gol”, las cuerdas vocales se exponen a una “disfonía” y si a lo anterior se suma el consumo de alcohol y tabaco, el daño puede aumentar en forma sustantiva.
El grito está calificado como un aumento excesivo del volumen de voz, un contacto brusco de las cuerdas vocales, por lo que en general la consecuencia más inmediata es una disfonía temporal, pero la recurrencia de este esfuerzo puede ser causante de una serie de afecciones de largo tratamiento.
Sánchez afirma que erróneamente, después de gritar mucho, la gente busca aliviar su malestar con bebidas frías, lo que lejos de ser una solución es el inicio de un problema mayor, ya que los líquidos con bajas temperaturas endurecen las cuerdas vocales, por lo que el daño de los gritos sucesivos será mayor.
Otro error es el concepto de “remojar la garganta” con algún licor, puesto que el alcohol deshidrata las cuerdas vocales y el esfuerzo para gritar es mayor.
A todo lo expuesto, se suma la inconveniencia del tabaco por negativo efecto en la totalidad del aparato fonatorio.
El especialista da algunas recomendaciones como no gritar los goles, sino que celebrarlos con aplausos u otras manifestaciones; consumir mucha agua, ya que las cuerdas vocales requieren de hidratación para su buen funcionamiento, lubricación y limpieza; evitar fumar; mantener el rostro y cuello relajados; beber líquidos tibios, debido a que no sólo suaviza las cuerdas vocales, sino que también alivia cualquier sensación de picazón o de irritación en la garganta; y evitar carraspeo.
