Publicidad
Al borde del llanto: Bachelet da giro y opta por romper su silencio ante el caso Caval Presidenta dio escueta declaración tras formalización de su nuera

Al borde del llanto: Bachelet da giro y opta por romper su silencio ante el caso Caval

Marcela Jiménez
Por : Marcela Jiménez Periodista de El Mostrador
Ver Más

“Desde el corazón, quiero decir que han sido tiempos difíciles para mí y para mi familia, muy dolorosos, y que sin duda eso me ha afectado profundamente, es un sentimiento humano normal. Pero eso no me ha nublado ni por un minuto de lo que son mis responsabilidades como Presidenta de la República y como jefa de Estado”, agregó con la voz entrecortada.


Un minuto exacto. Eso duró la inédita declaración que esta tarde dio la Presidenta, Michelle Bachelet, para referirse al polémico Caso Caval y la situación de su nuera, Natalia Compagnon, que en esta jornada fue formalizada por delito tributario y le fueron impuestas medidas cautelares de firma mensual y arraigo nacional. Palabras breves, pero contundentes con las cuales la Mandataria dio un giro a su insistencia de no pronunciarse públicamente sobre este caso y esquivar todo tipo de preguntas al respecto.

En el salón O’Higgins de La Moneda, Bachelet entró sola y apenas comenzó a hablar su voz se entrecortó rápidamente. “Quiero hablar de la audiencia de las formalizaciones del día de hoy, yo he querido hablar porque este es un caso que ha concentrado la atención de la gente, que espera sin duda que la justicia actúe con imparcialidad en este y en otros casos”, dijo.

Durante la mañana en Palacio no descartaron la posibilidad de que la Mandataria se pronunciara, lo que finalmente fue confirmado media hora antes de su declaración, advirtiendo que Bachelet no aceptaría preguntas. “Desde el corazón, quiero decir que han sido tiempos difíciles para mí y para mi familia, muy dolorosos, y que sin duda eso me ha afectado profundamente, es un sentimiento humano normal. Pero eso no me ha nublado ni por un minuto de lo que son mis responsabilidades como Presidenta de la República y como jefa de Estado”, agregó visiblemente al borde del llanto.

A renglón seguido, conteniendo la voz quebrada, acotó que “los chilenos demandan, merecen, igualdad de oportunidades y derechos y eso también incluye igualdad ante la ley y yo voy a seguir trabajando por lo que me he comprometido con la gente: por hacer de este país un país equitativo, más justo y más digno para todos. Y de eso los chilenos pueden tener confianza». Acto seguido, la Presidenta se dio media vuelta, rápidamente salió del salón y la puerta se cerró a sus espaldas.

Lo visiblemente emocionada que se vio a la Mandataria comprueba lo que se ha comentado por mucho tiempo tras bambalinas en el Gobierno y en Palacio: que el Caso Caval la supera. De hecho, en La Moneda comentaron en reserva, tras escuchar la declaración, que “ahora se entiende su negativa a hablar del tema, se nota que realmente no puede”.

Antecedentes de ello existen. En el primer consejo de gabinete de este año, el lunes 4 de enero, la Presidenta –en el transcurso de la reunión– advirtió a todo su gabinete que no quería hablar del Caso Caval con nadie, bajo ninguna circunstancia, ni en público ni en privado, tampoco en bilaterales de ninguna índole.

Esa imposibilidad de la Mandataria de hablar del tema explica por qué en Palacio no tienen respuesta a la demanda desde la Nueva Mayoría de bajar una línea política para enfrentar coordinadamente como oficialismo los vaivenes de este caso, como también su profunda molestia con los medios de comunicación hace una semana, cuando la prensa la siguió por la Plaza de la Constitución tras una actividad pública preguntándole por las distintas aristas del proceso judicial en que está involucrada su nuera.

En el oficialismo y en el propio Gobierno desde siempre se ha criticado en reserva que la Presidenta nunca saliera a condenar públicamente el actuar de su familia, de Compagnon y su hijo, Sebastián Dávalos. Hoy tampoco lo hizo, pero en La Moneda valoran el cambio de actitud de Bachelet y consideran que fue “una decisión acertada” romper, al menos, el silencio autoimpuesto.

Agregan que este giro que dio la Jefa de Estado inevitablemente le da un respiro. El plan inicial en Palacio para hoy era mantener la estrategia del silencio y la distancia, esquivar lo más posible la incómoda y complicada situación de su nuera, pero el miércoles se hizo un cambio radical.

Originalmente, Bachelet iba a encabezar una ceremonia en Cabo de Hornos por los 400 años de su descubrimiento, pero el viaje fue cancelado el miércoles en la tarde, durante la gira a Ecuador para participar en la reunión en la Celac. No se dieron mayores explicaciones desde Presidencia, argumentando que la Mandataria tenía actividades en Santiago y que eran habituales estos cambios de agendas.

Sin actividades fuera de La Moneda, Bachelet optó hoy por recibir a primera hora de la mañana a líderes internacionales del Partido Socialista que se encuentran en Chile para participar del Seminario y del XXX Congreso del partido y, luego, encabezó una reunión de trabajo con la ministra de Salud, Carmen Castillo, para coordinar acciones preventivas para enfrentar un eventual ingreso del virus Zika a Chile.

Un intento de dar un sello de normalidad, para un día que estaba lejano de serlo y que era uno bastante amargo para la Mandataria, como quedó en evidencia con sus escuetas palabras.

Vea acá las declaraciones de la Presidenta Michelle Bachelet.

Publicidad

Tendencias