“Un buen sindicato no debería necesitar de estas concesiones para captar adherentes”, dice el documento del ala conservadora de la DC criticando la Reforma Laboral, que además asegura que el Gobierno no ha aprendido de sus propias experiencias.
Mariana Aylwin, Hugo Lavados, Álvaro Clarke y Eduardo Aninat, son algunos de los militantes de la DC que socializaron una crítica declaración sobre la Reforma Laboral bajo el nombre “Progresismo con Progreso”, según consigna hoy El Mercurio.
En enero de 2015 algunos miembros del partido ya habían elaborado un documento que pedía que se corrigiera el rumbo del actual gobierno.
Esta vez fueron ocho los puntos más cuestionados. Los democratacristianos plantean que aunque la Reforma Laboral fortalece los derechos de los trabajadores, “lleva las atribuciones sindicales a tal nivel que existe un serio riesgo de desalentar la inversión y afectar la capacidad de competir de la empresas, particularmente las pymes», dice El Mercurio.
Además acusan que de aprobarse el proyecto tal como está, afectará el crecimiento, la creación de empleos y la capacidad de incremento de salarios a largo plazo. A excepción de México, dice la declaración, todos los países OCDE contemplan el reemplazo interno en huelga y asegura que el Gobierno no aprendió de la experiencia de las huelgas del Registro Civil y la Dirección General de Aeronáutica Civil, ambas durante el año pasado. Ambos casos, dice El Mercurio, son un «claro ejemplo de cómo un grupo pequeño de trabajadores puede afectar a todo un país». Y agrega que «el propio Gobierno tuvo que recurrir a reemplazos externos para intentar subsanar una situación de altísimo costo social».
“Un buen sindicato no debería necesitar de estas concesiones para captar adherentes”, dice el texto, criticando la extensión de beneficios contemplada en la iniciativa. «La exclusividad del sindicato para extender los beneficios de la negociación colectiva al resto de los trabajadores termina con la libertad sindical en la práctica, lo que es un factor clave de competencia y mejores prácticas sindicales», señala. El escrito critica también que la reforma no incluya la modernización de los programas de capacitación laboral para aumentar la productividad de los trabajadores y sus ingresos.
Actuar con cuidado y prudencia es el llamado del grupo DC para evitar altos costos que podría traer una “mala reforma”. Además, reprocha la indicación del Ejecutivo sobre adecuaciones necesarias, pues provocaría una judicialización de las relaciones laborales, aumentando el riesgo de “inhibir la inversión”.
