Fue visitada por la Presidenta Bachelet
El Juzgado de Garantía de Coyhaique acogió la solicitud de la Fiscalía, que a su vez presentó el testimonio de un testigo clave, que observó los hechos desde una ventana.
El mecánico identificado como Mauricio Ortega, quedó en prisión preventiva como único sospechoso de la agresión que mantiene con riesgo vital a Nabila Rifo, de 28 años. Ortega es el padre de los dos hijos de Rifo. La fiscalía lo apunta como responsable de la golpiza contra la mujer, que le significó una fractura de cráneo, lesiones graves en el rostro –que obligarán a que los médicos trabajen en reconstruirlo– y además la extracción de sus globos oculares.
El Juzgado de Garantía de Coyhaique, donde ocurrieron los hechos el pasado fin de semana, decretó la medida cautelar contra el sujeto formalizado por femicidio frustrado. La Fiscalía que le imputa este delito presentó el testimonio de un testigo que resultó ser clave. El joven de 17 años de iniciales C.J.M.A relató a Carabineros lo ocurrido a partir de lo que vio desde su ventana.
«En ese momento sentimos los gritos de una mujer, al principio pensé que estaba ebria. Al aumentar la intensidad de los gritos mi amiga me dijo que observara y desde el interior de mi propiedad, hacia la esquina de calle Monreal con Lautaro, lo primero que observé fue un hombre vestido de ropa color negro, el cual estaba arrodillado en dirección al poniente, que movía sus manos hacia arriba y hacia abajo y yo sentía un fuerte golpe», dice el testimonio que leyó el fiscal Pedro Salgado y que consigna Radio Cooperativa.
«Luego de eso el sujeto se levanta y comienza a caminar en dirección al oriente, luego el tipo se devuelve, se pone de rodillas en el suelo y comienza a realizar la misma acción con sus manos, golpeando algo en el suelo. Momentos después el sujeto comienza a correr por calle Lautaro», dice el testimonio del testigo.
La fiscalía presentó como prueba un bloque de cemento que el individuo habría usado para golpear el rostro de la víctima.
En tanto, Nabila Rifo fue visitada en la Posta Central por la Presidenta Michelle Bachelet durante la mañana de este miércoles.
«[Nabila] está en buenas condiciones, en el sentido de estar recibiendo toda la atención necesaria, todavía está sedada, no está en condiciones de conversar, pero en la medida que sea prontamente desconectada del respirador artificial va a poder volver a tener un estado de consciencia que le permita comunicarse con los demás», dijo la Mandataria.
«Este es un caso que nos tiene choqueados a todos, el nivel de violencia y brutalidad es algo tremendo que vamos a trabajar sin descanso, como Gobierno, para evitar que este tipo de casos vuelvan a suceder en nuestro país, y esperamos lo mismo que la familia: que haya justicia», enfatizó la Presidenta.
