El presidente de la comisión de DD.HH. del Senado, Alejandro Navarro (MAS), señala que «los lineamientos de Frontaura son claros y precisos, conocidos y públicos, basta ver en su página web. Pero es un tema que está abierto y más aún cuando el 2 de julio estos directores van a elegir entre ellos al director».
El próximo miércoles se abrirá una nueva disputa en el Senado, entre la oposición y el oficialismo, debido a que la comisión de Derechos Humanos de la Cámara Alta comience a debatir sobre la designación del nuevo consejero del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH).
El decano de la facultad de derecho de la Universidad Católica, Carlos Frontaura, concurrirá a la instancia, luego que fuera elegido por la corporación como miembro del directorio del organismo en 2013, pero cuyo nombre ha generado resistencia en algunos sectores oficialistas.
Según consigna Emol.com, la propuesta del académico ha sido impulada por la oposición que lo ve como una posibilidad de preservar el equilibrio político al interior delorganismo que encabeza Lorena Fries, quien a su vez ha estado en el centro de las críticas de Chile Vamos por sus actuaciones contra Carabineros en las últimas manifestaciones.
Sus posiciones conservadoras y la posibilidad que su nombramiento responda a un cuoteo político, provocaron la reacción de la Nueva Mayoría, donde no dan por seguro la opción del jurista.
De esta forma, el presidente de la comisión de DD.HH. del Senado, Alejandro Navarro (MAS), señala que «los lineamientos de Frontaura son claros y precisos, conocidos y públicos, basta ver en su página web. Pero es un tema que está abierto y más aún cuando el 2 de julio estos directores van a elegir entre ellos al director».
Agregó que «hay un delicado equilibrio político en el Instituto y la constatación es que nuevamente el binominalismo se hace presente. Hoy el equilibrio es bien precario, pero el Senado es libre de proponer el nombre que estime adecuado».
Por tal motivo, explicó que la decisión de renovar el periodo de Frontaura no es seguro, ya que «pueden haber otros nombres y se votará con los nombres que haya, puede ser cualquier ciudadano. En lo personal, hay un nombre que yo estoy dispuesto a apoyar, que es Yerko Ljubetic, y voy a trabajar para que esté entre las alternativas».
Por su parte, el integrante de la comisión, el senador Manuel Antonio Matta (DC) señaló que a pesar que Frontaura es el primer nombre propuesto, «personalmente no lo conozco, me tengo que informar acerca de quién es efectivamente esta persona para decidir en conciencia».
«No tengo decisión de voto al respecto, tendría que analizar debidamente la trayectoria, antecedentes y opiniones antes de tomar una decisión. Tampoco voy a votar ahí por un acuerdo político previo, así es que yo estoy abierto a considerar todos los antecedentes y sobre esa base tomar una opinión», señaló.
En ese sentido, explicó que la decisión «hay que pensarla bien porque es un organismo muy delicado, en el cual los sesgos que pueden haber de carácter ideológico, cruzan transversalmente a todas las fuerzas políticas y yo personalmente no estoy por hacer del Instituto una trinchera política».
Por su parte, la senadora UDI e integrante de la comisión de DD.HH., Jacqueline Van Rysselberghe, sostuvo que la oposición dará su respaldo al abogado, quien además ha trabajado para la Fundación Jaime Guzmán.
«Si, él estaba dentro del consejo del Instituto, y nosotros queremos que se ratifique. Se postuló a Carlos Frontaura y va a ser entrevistado en la comisión y está citado para el miércoles. Con posteridad, tendrá que ser votado en la sala», precisó.
Respecto a las críticas sobre la posibilidad que el cupo sea un “cuoteo”, la legisladora opositora explicó que “eso es minimizar la discusión, hacer una caricatura. La idea es que se preserve la diversidad de posiciones, las materias de derechos humanos no son blanco y negro hay varias áreas grises y por eso es importante tener representadas a todas las visiones».
