En el hospital Gustave Roussy afirmaron que el economista, cuyo último paradero fue fijado en Rumania, nunca estuvo entre los pacientes del lugar
En agosto, el economista Rafael Garay anunció en su cuenta de facebook que tenía cáncer terminal, después que le diagnosticaran un tumor en el cerebro. La información fue amplificada por los diarios y la televisión, que incluyeron el detalle de que Garay por razones ideológicas no quería intentar un tratamiento en Estados Unidos porque «su política internacional ha causado mucho dolor y sufrimiento».
Por eso, Garay en la historia sobre su tratamiento, contó que fue a Francia donde los médicos según dijo le habían dicho que no perdiera la esperanza pero que «ordenara» su patrimonio.
«Seguí un tratamiento de un año en Japón y falló. Ahora fui a Francia, estuve dos semanas hospitalizado en el centro europeo del cáncer Gustave Roussy, y fueron bien claros. Me dijeron que diera la pelea, pero que ordenara mi patrimonio y dejara instrucciones claras si no quería ser conectado a un respirador o ese tipo de cosas».
Un nuevo intento sería la ocasión de su viaje fuera de Chile a partir del 4 de septiembre, cuando las autoridades chilenas y un registro del aeropuerto, afirman que salió del país. En ese contexto se despidió de familiares y amigos.
Sin embargo, la clínica francesa contactada por La Tercera y Canal 13 negó que Rafael Garay esté o haya sido paciente del recinto. “Lo siento, no hay ningún paciente con ese nombre”, dijo una secretaria del hospital Gustave Roussy. La secretaria aseguró que Garay tampoco aparece en los registros.
