El fiscal de O’Higgins insistió en que no cree que el máximo representante del Ministerio Público tenga algo personal en su contra. Y además de descartas la posibilidad de dejar la Fiscalía, afirmó que ahora sólo quiere «trabajar tranquilo».
El fiscal regional de O’Higgins, Emiliano Arias, recibió con tranquilidad este viernes la sanción que recibió por parte del fiscal nacional, Jorge Abbott por su actuación «de oficio» en la indagatoria a la empresa CGE por el incendio forestal en Pumanque y por supuestamente haber filtrado información del caso a la prensa.
Abordado esta tarde en el Aeropuerto Internacional de Santiago, al que llegó en un vuelo procedente del sur del país, Arias dijo que no estaba de acuerdo con la medida, una de las más altas que se aplica a los funcionarios del Ministerio Público y que significará un recorte del cinco por ciento de su sueldo. En ese sentido lamentó que no tenga la posibilidad de apelar a la decisión, en la que se le responsabilizó de haber infringido la Ley Orgánica Constitucional del Ministerio Público y el reglamento interno institucional.
«Me sorprende, mi posición es no haber cometido ninguna infracción”, sostuvo, agregando que «es un inconveniente que tiene nuestro sistema sancionatorio administrativo: no tenemos a quién recurrir, no hay un órgano imparcial o un tercero u otra instancia que pueda revisar esta decisión. Ese es un defecto del sistema que podría ser incluso de naturaleza anticonstitucional”.
Además de insistir en que no cree que Jorge Abbott tenga algo personal contra él, el fiscal de O’Higgins se mostró conforme y descartó que este episodio lo haga pensar en dejar la Fiscalía.
“Lo que quiero es trabajar tranquilo. En la región me ha ido bastante bien. En el tema del incendio, el equipo ha trabajado mucho. Estamos en posibilidades, negociando con la empresa, la indemnización de las víctimas, una cuestión que no se había visto nunca antes en un proceso de esta naturaleza”, afirmó.
