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Sigue la polémica entre el rector de la UDP y la colectividad presidida por Hernán Larraín Matte, luego que el partido autodenominado liberal se alineara con la UDI para que las clínicas que rechazan realizar abortos sigan recibiendo recursos públicos. Evópoli defendió su postura, señalando que “hay buenos argumentos liberales” para oponerse al reglamento del Gobierno, pero el columnista fue tajante: “ser liberal a costa ajena es fácil”.
«No se puede pretender ser liberal abrazando causas conservadoras”. Con esta frase, el rector de la Universidad Diego Portales, Carlos Peña, replicó al presidente de Evópoli, Hernán Larraín Matte, quien insistió en defender el respaldo prestado por este partido al requerimiento de diputados de Chile Vamos ante el Tribunal Constitucional contra el reglamento de objeción de conciencia personal e institucional en materia de aborto.
La polémica se inició el domingo cuando el columnista de El Mercurio publicó un artículo en donde cataloga al partido como “liberales a costa ajena”. La columna fue respondida por Larraín Matte ayer en una carta al director en el mismo medio, donde señala que “hay buenos argumentos liberales” para oponerse al reglamento del Gobierno.
Según Larraín Matte, se trata de defender a los privados con función pública. «¿Una institución objetora puede, o no, dar una prestación como una cesárea? Nosotros creemos que sí», dijo el jefe del partido.
En la polémica se sumó el senador Felipe Kast quien señaló este martes en Radio Duna que “la política se trata de convicciones y no de estar donde calienta el sol y nosotros creemos que se está vulnerando el derecho de propósito de los cuerpos intermedios”. “El error de Carlos Peña es mezclar el cumplimiento de la ley con la contratación de otros servicios”, añadió.
Pese a la respuesta de Evópoli, Peña insistió en sus argumentos, a través de una carta al director publicada este martes en El Mercurio.
En la misiva notifica a Larraín Mate que “no se puede pretender ser liberal abrazando causas conservadoras” y “ser liberal a costa ajena es fácil”.
A juicio del rector de la UDP, Larraín Matte “elude el problema que se ha planteado con las instituciones objetoras que celebran convenios con el Estado”.
El columnista añadió que “pretender eximirse del deber general de cumplir la ley en los casos de aborto y, al mismo tiempo, reclamar ser colaborador del Estado en las prestaciones ginecológicas u obstétricas a que este último está obligado, no tiene, simplemente, justificación”.
