Los parlamentarios del FA –acusados de actuar “con patudez” por sus colegas de Chile Vamos- replicaron señalando que el oficialismo “busca aprobar, en condición de minoría, un presupuesto” que contiene serios retrocesos.
La pelea epistolar entre parlamentarios del Frente Amplio y Chile Vamos por el Presupuesto 2019 continúa en las páginas de El Mercurio. Esta vez fue el turno de la respuesta de los congresistas del bloque de izquierda donde reclaman por los “epítetos”, “imprecisiones” y “caricaturas” de sus colegas de la derecha.
La disputa partió con la publicación el miércoles de una carta de los parlamentarios del FA donde se quejaron por las platas destinadas para educación, ciencia y cultura que evidencia –a su juicio- un “marcado sesgo ideológico” de la administración Piñera. Ayer, los jefes de bancada de diputados de Chile Vamos respondieron por el mismo medio, acusando a sus colegas del Frente Amplio de actuar con “patudez”.
En su réplica publicada hoy, los mismos parlamentarios del FA -Camila Rojas (Izquierda Autónoma), Giorgio Jackson (Revolución Democrática), Gonzalo Winter (Movimiento Autonomista) y Juan Ignacio Latorre (Revolución Democrática)- rebaten a los diputados del oficialismo, acusando “imprecisiones” en sus argumentos.
“Primero, nos endosan al Frente Amplio (FA) una supuesta responsabilidad por la situación de las arcas fiscales, argumentando, entre otras cosas, la reforma tributaria, cuyo texto final -tras la negociación binominal- rechazamos desde el FA, pero que las bancadas de Chile Vamos aprobaron”, señalan.
Luego, indican que “se nos acusa de «gran patudez» y de «retrasar los desafíos sociales más importantes», por apoyar el «fin al CAE», o por querer incorporar el reparto como principio para mejorar hoy las pensiones de miseria que el modelo de AFP ha generado. A diferencia de los firmantes, nosotros creemos que reducir el endeudamiento de los jóvenes de clase media, o la pobreza de nuestros adultos mayores, sí son problemas urgentes”.
Añaden que la desinformación sobre el presupuesto es preocupante, dado que “el Gobierno innovó en la forma de presentar los datos”, lo que atribuyen a un «truco» del ministro de Hacienda, Felipe Larraín.
“En este contexto, el oficialismo busca aprobar, en condición de minoría, un presupuesto que contiene no solo los retrocesos mencionados, sino varios más que han sido rechazados por la oposición. Por lo mismo, se esperaría mayor humildad de sus jefaturas de bancadas para facilitar el diálogo, en vez de caricaturas”, finaliza la misiva.