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«En el Tribunal Constitucional hasta el momento, nosotros no teníamos ningún tipo de oportunidad para poder opinar, para poder establecer nuestros argumentos jurídicos relativo al artículo 13. Hoy en la Corte Suprema nosotros encontramos un lugar donde discutir jurídicamente estos antecedentes como ciudadanos y ciudadanas», explicó a El Mostrador el abogado Cristóbal Osorio [ACTUALIZADA]
La Tercera Sala de la Corte Suprema declaró este martes como admisible el recurso de protección interpuesto por los abogados Cristóbal Osorio, Gabriel Osorio y la agrupación de Abogadas Feministas de Chile (Abofem) en contra del Presidente Sebastián Piñera y el ministro de Salud, Emilio Santelices, por el reglamento de objeción de conciencia en el marco de la ley de aborto en 3 causales.
En concreto, el recurso presentado dice relación con el artículo 13 del protocolo, que establece que los establecimientos privados que tengan convenios con el Estado, «no podrán ser objetores de conciencia cuando contemplen prestaciones de obstetricia y ginecología que por su naturaleza comprendan atenciones en pabellón».
«Nosotros nos encontramos profundamente felices con la admisibilidad del recurso, porque vamos a poder, en un tribunal de la República, establecer si los establecimientos privados que reciben financiamiento público, pueden o no objetar conciencia», sostuvo Cristóbal Osorio.
«En el Tribunal Constitucional hasta el momento, nosotros no teníamos ningún tipo de oportunidad para poder opinar, para poder establecer nuestros argumentos jurídicos relativo al artículo 13. Hoy en la Corte Suprema nosotros encontramos un lugar donde discutir jurídicamente estos antecedentes como ciudadanos y ciudadanas», agregó.
Sin embargo, la decisión del máximo tribunal podría generar una contienda con el Tribunal Constitucional (TC), esto luego que en octubre, senadores de la UDI y Renovación Nacional (RN) presentaran un requerimiento ante el TC con el objetivo de revisar dicho reglamento.
Una situación que el abogado calificó como «anómala» y «desregulada», además de ser «inédita». «Es absoluta y completamente inédito lo que está ocurriendo. Surge una contienda de competencias entre el Tribunal Constitucional y la Corte Suprema que es de carácter anómala y desregulada, porque no existe una norma legal que pueda resolver este conflicto de competencias que existe entre la Corte Suprema y el Tribunal Constitucional».
