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«El Presidente Piñera nos debe. Estado de cuenta en materia de derechos humanos» es el título del informe presentado durante esta jornada por Amnistía Internacional Chile. En él, se analizaron 26 áreas, y salvo en dos, todas las demás aumentaban la «deuda» del Gobierno en Derechos Humanos. El reporte es especialmente crítico con el plan gubernamental de «ordenar la casa» en materia migratoria, y en otras áreas como Aula Segura, Calle Segura y el excesivo uso de la fuerza por parte de Carabineros, mencionando directamente el caso de Camilo Catrillanca. Pero el informe fue rápidamente desacreditado por el Gobierno. Según el ministro del Interior, Andrés Chadwick, “debieran recabar más antecedentes para hacer bien su trabajo”.
Un crítico análisis de la actual situación de los Derechos Humanos y cómo han sido abordados por el actual gobierno de Sebastián Piñera, presentó esta jornada Amnistía Internacional-Chile (AI), con miras a la Cuenta Pública que se realizará este sábado.
Si bien el organismo asegura que el documento de 14 páginas «no tiene la pretensión de ser un análisis exhaustivo», concluye que «durante el primer año de mandato del Presidente Sebastián Piñera hemos visto que el Gobierno ha tomado decisiones que lamentablemente implican que la deuda ha crecido en lugar de disminuir».
De hecho, el informe menciona al mismo Mandatario en su título: «El Presidente Piñera nos debe. Estado de cuenta en materia de derechos humanos». En él, analizaron 26 áreas. El resultado, presentado por AI, es poco alentador: la deuda del gobierno en materia de DD.HH. «ha aumentado» en un 53,65%, «se ha mantenido» en un 38,46% y «ha disminuido» solo en un 7,69%.
Pero el informe fue rápidamente desacreditado por el Gobierno. Según el ministro del Interior, Andrés Chadwick, el documento de Amnistía Internacional es «sesgado e ideologizado» e incluyó información errónea en materia de migraciones. “Es muy sesgado, muy genérico, le falta información, debieran recabar más antecedentes para hacer bien su trabajo”, dijo el secretario de Estado, según informa La Tercera.
Según Chadwick, “yo no he leído el informe, he leído lo que ha publicado la prensa, solo dos comentarios: me parece una visión muy sesgada, muy ideologizada, se centra fundamentalmente en materia de proyectos de ley en materia de género y sexualidad y no hay una palabra para la agenda de mujer que ha impulsado el Presidente, y que ya se ha concretado en varias materias”.
Desmenuzando el informe, sólo dos puntos son marcados como favorables para el Gobierno, lo que implica que baje esa «deuda»: la aprobación de la Ley de Identidad de Género y la promulgación de la ley que crea el Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura.
El resto de los puntos, son todos negativos. Dentro de los principales que afectan el «estado de cuenta» redactado por AI están los temas relacionados a derechos sexuales y reproductivos, apartado en el que si bien celebran la aprobación de la despenalización del aborto en tres causales, establecen que “decisiones” del gobierno han obstaculizado su aplicación, citando “como ejemplo más evidente” el “reglamento para la aplicación de objeción de conciencia”.
Otros temas que aumentan la «deuda» hacen referencia a «la igualdad de derechos en materia de matrimonio» y que la adopción por parte de parejas del mismo sexo no ha «contado con un apoyo activo» del gobierno.
En el ámbito de la inmigración la «deuda» del Gobierno también aumenta, ya que el informe de AI detalla «situaciones de discriminación y violencia en contra de personas migrantes y refugiadas», entre otros tópicos.
Parafraseando a Piñera, quien dijo que había que «ordenar la casa» en materia migratoria, el informe del AI expresa que «resulta brutal cuando se está hablando de personas, pues ‘ordenar la casa’ usualmente significa botar lo que no nos sirve».
Dentro del resto de áreas analizadas en el informe, Aula Segura, Calle Segura y el excesivo uso de la fuerza por parte de Carabineros -mencionando directamente el caso de Camilo Catrillanca- han contribuido a aumentar «la deuda».
No todo es negativo para Piñera. En AI reconocen que, si bien la deuda en materia de DD.HH. ha aumentado, quedan tres años para que el gobierno tome nuevas decisiones que efectivamente pongan estos derechos en el centro de todas las discusiones y políticas públicas.
“Es importante advertir que para que los cambios se den, es necesario también contar con una ciudadanía despierta y movilizada que sea capaz de pasarle la cuenta a las autoridades que están en deuda con aspectos que inciden directamente en la dignidad, la igualdad, las condiciones de vida y la justicia para todas las personas”, indicó Ana Piquer, directora ejecutiva de Amnistía Internacional Chile.
