PAÍS
Si bien diputadas de RN aseguraron que el propio Mandatario les señaló que Salaberry presentó su renuncia al cargo, en Palacio han evitado confirmar la información. La ministra Cecilia Pérez tuvo una actividad con prensa en la mañana, pero evitó responder consultas al respecto. Al mediodía, Piñera se reúne con el complicado titular de la Subdere. [EN DESARROLLO]
La Moneda ha estirado el chicle hasta el máximo con la situación del subsecretario de Desarrollo Regional, Felipe Salaberry. Anoche, tras una cena que sostuvieron con el Presidente Sebastián Piñera, diputadas de RN aseguraron que el propio Mandatario les señaló que Salaberry presentó su renuncia al cargo.
Pero la información no ha sido confirmada a nivel oficial en Palacio. En privado, fuentes de Gobierno señalaron que no pidieron la renuncia ni Salaberry la ha presentado, y todas las miradas se centran en lo que pase al mediodía cuando el todavía titular de la Subdere se reúna con el jefe de Estado.
La actitud de espera del Gobierno con el funcionario –quien ha sido férreamente defendido por la UDI- también quedó en evidencia con la señal de la ministra vocera Cecilia Pérez, quien esta mañana tuvo una pauta con medios de comunicación a propósito de las agresiones a la prensa en la marca ambientalista del viernes en el centro de Santiago. Pero como pocas veces, la ministra portavoz se retiró del lugar, y no esperó las consultas de la prensa.
La situación del subsecretario es insostenible. A la presión por el incidente de tránsito de Ñuñoa, y a la desvinculación de su hermana, la funcionaria municipal Iris Salaberry, por parte del alcalde ñuñoíno el exRN Andrés Zarhi, y una indagatoria por oficio abierta por la Fiscalía Metropolitana Oriente, también hay otros hechos que complican a Salaberry.
Estas nuevas revelaciones tienen como protagonista a Brunella Vinet Matasoglio, pareja del subsecretario, quien se desempeña como jefa de gabinete en la intendencia de Arica y Parinacota. La abogada se ha visto beneficiada por contratos y aumentos de sueldo en condiciones ventajosas en el gobierno regional, solo por ser pareja del titular de la Subdere, indican fuentes del gobierno regional.
A esto se suman los líos internos del subsecretario en la gestión en la Subdere denunciados por la Federación Nacional de Asociaciones de Funcionarios del Ministerio del Interior y Servicio Afines del (Fenaminsa). El gremio acusa pésimo clima laboral, acoso permanente de su personal de confianza, intento de contratación de profesionales «con gran prontuario judicial para cargos de gestión financiera”, sumarios a dirigentes y más de 100 despidos.
