PAÍS
La semana pasada, Parada, junto a un grupo de firmantes de la carta Democracia es Diálogo, pidió al ex Congreso y a La Moneda un diálogo transversal y respeto a los derechos humanos.
Javiera Parada hizo efectiva su renuncia a Revolución Democrática (RD), a través de una carta en la que manifestó una serie de críticas a la tolda y planteó que la idea de apoyar la acusación constitucional contra el Presidente Sebastián Piñera es «un acto irresponsable».
«Lamentablemente, las decisiones tomadas por RD en el último tiempo me han ido distanciando irremediablemente del partido. Los años de historia política que cargo encima me han enseñado algunas cosas: En la izquierda no estamos libres de las pulsiones antidemocráticas; tampoco estamos libres de los laberintos éticos en que cayó la Concertación; en la izquierda chilena no somos inmunes al caudillismo que tanto mal le ha hecho a Latinoamérica; no tenemos el monopolio ni de la justicia social, ni de la ética, y desde luego en la historia de la izquierda hay belleza, pero también hay autoritarismo, ruido y furia», dice la carta que dio a conocer The Clinic.
«¿Cómo es posible que mi coalición se reste del diálogo con el Jefe de Estado democráticamente elegido? ¿Cómo es posible que en la mitad de la peor crisis en democracia se persiga una acusación constitucional contra el presidente de la República? ¿Cómo es posible que muchos estén haciendo política hoy desde las pasiones, la fiebre del momento y no desde el discernimiento racional? ¿Cómo es posible que estemos sacando cálculos pequeños y no pensando cómo mejoramos la vida de las personas que habitan nuestro país?», agregó Parada.
Respecto a la acusación constitucional contra Piñera, la ahora ex militante del partido del Frente Amplio (FA) sostuvo que «me parece un acto de una irresponsabilidad gigante y que provocará una desestabilización institucional mayor, cuando lo que necesitamos, precisamente es canalizar institucionalmente las demandas de la ciudadanía por medio del diálogo».
La semana pasada, Parada, junto a un grupo de firmantes de la carta Democracia es Diálogo, pidió al ex Congreso y a La Moneda un diálogo transversal y respeto a los derechos humanos.
