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Crédito: Poder Judicial
Se le imputó por los delitos de tráfico de influencias, nombramiento ilegal, negociación incompatible, incremento patrimonial injustificado y estafa procesal.
Este viernes, inició la audiencia de formalización del removido ministro de la Corte de Apelaciones de Rancagua, Marcelo Vásquez, donde se le imputó por los delitos de tráfico de influencias, nombramiento ilegal, negociación incompatible, incremento patrimonial injustificado y estafa procesal.
El persecutor de la Fiscalía Metropolitana Sur, Christian Toledo, explicó ante el Juzgado de Garantía de Rancagua una serie de situaciones en las que Vásquez tendría responsabilidad en calidad de autor.
Entre los que mencionó, se encuentra uno en el que Vásquez, en su calidad como presidente de la Corte de Rancagua, «firmó a sabiendas» de las inhabilidades respectivas, resoluciones que designaban a su hija en cargos de consejera técnica en tribunales de la zona.
Entre la evidencia recopilada, se encuentran copias de conversaciones entre el ministro y otros funcionarios.
Toledo también acusó un incremento patrimonial relevante e injustificado cercano a $44.716.906, al igual que coordinaciones e intervenciones con un abogado y particular para evitar que este último perdiera una propiedad tras no saldar una deuda hipotecaria. «Como consecuencia de las conductas ilícitas realizadas por el imputado (…) y del análisis de la totalidad de los ingresos de índole patrimonial y movimientos bancarios registrados durante los años 2016 y 2018 obtuvo un incremento patrimonial relevante e injustificado», explicó.
Vásquez quedó con firma mensual y arraigo nacional.
