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A este grupo de trabajo también fue invitado el Colegio de Profesores, quienes declinaron participar de la instancia al considerar que también deberían participar las comunidades escolares, es decir, alumnos, apoderados y asistentes de la educación.
El Ministerio de Educación, en conjunto con la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), convocaron a profesionales de distintas áreas para que los asesoren en la reapertura de colegios durante el 2020 y 2021.
De acuerdo a Emol, es el Consejo Asesor «Abrir las escuelas paso a paso», conformado por 19 miembros, que incluye a los ministros de Educación y Salud, expertos de la Unesco y la Unicef, las directoras de Educación 2020, Alejandra Arratia, y de Acción Educar, Magdalena Vergara; Sylvia Eyzaguirre, del Centro de Estudios Públicos (CEP); expertos de la Universidad Católica (UC) y de la Universidad de Chile, además de profesionales en el área de pediatría y epidemiología. También estará la alcaldesa de Peñalolén, Carolina Leitao, un representante de la Asociación de Municipios Rurales y otro de los Servicios Locales de Educación.
Desde el Mineduc indicaron que esta mesa de trabajo se encargará de orientar a las comunidades educativas en el proceso de retorno a la aulas de clases para que sea «gradual, seguro y voluntario».
El grupo sesionará una vez por semana y va a monitorear el retorno a clases presenciales, analizar el desarrollo del plan de retorno voluntario en los establecimientos que ya han abierto, revisar la evidencia sobre el impacto que ha tenido la interrupción de las clases presenciales, y finalmente dialogar, consultar y comunicar sobre las medidas propuestas para el retorno a clases.
Al respecto, el ministro de Educación, Raúl Figueroa señaló que «junto a Unesco, compartimos el diagnóstico sobre el impacto negativo que tiene la prolongada suspensión de clases presenciales para los miles de niños y jóvenes, y la urgencia de abrir las puertas de los colegios en los lugares donde las condiciones sanitarias lo permitan, para que puedan reencontrarse con sus pares y seguir aprendiendo. Por eso hemos querido, junto a Unesco, convocar a un grupo de trabajo que permita acompañar y apoyar a los establecimientos que están solicitando su apertura y orientar a quienes opten por un retorno seguro, gradual y voluntario».
A este grupo de trabajo también fue invitado el Colegio de Profesores, quienes declinaron participar de la instancia al considerar que también deberían participar las comunidades escolares, es decir, alumnos, apoderados y asistentes de la educación.
El presidente de magisterio, Mario Aguilar detalló que «el ministro de Educación me llamó hace unos días para preguntarme cual era nuestra disposición a participar de una instancia de este tipo. Le señalé que estábamos disponibles a participar de una mesa de trabajo donde estuviéramos todos los directamente involucrados en el tema del retorno a clases. Que estuvieran los expertos sanitarios, los sostenedores y también los miembros de las comunidades escolares, y le señalé que me parecía insuficiente que estuviéramos solo los profesores y profesoras».
«Cualquier decisión sobre el retorno a clases tiene que tener la participación de quienes van a retornar a clases. Sin embargo, el ministro no estaba considerando y no ha considerado la participación de estas instancias, de los representantes de las comunidades escolares», agregó.
Insistió en que «a nosotros nos parece que eso es totalmente inadecuado, y eso refleja poca disposición de diálogo. Creemos que una mesa de este tipo debe estar conformada necesariamente por quienes van a estar directamente afectados por la decisión».
«No nos hemos negado a participar (…) lo que hemos solicitado es que tenga una participación real, donde estén aquellos que van a verse afectados por la decisión (…) Para que sea una verdadera instancia de diálogo (…) no puede hacerse solo con «expertos» y sin que estén los directamente afectados. Eso nos parece una condición indispensable».
También dijo que «le señalé al ministro que me parecía que debía trabajarse no para forzar un retorno ahora en el corto plazo (…) porque además la gente no tiene confianza para eso. Lo que teníamos que hacer es preparar generar las condiciones para un retorno seguro, para que la gente sienta confianza de que va a poder enviar a sus hijos al colegio sin que haya riesgo para la salud y para la vida de esas personas».
«Yo llamo al ministro y al Gobierno a que rectifique este error que están cometiendo, porque por nuestra parte estamos disponibles, pero también debe invitarse a todos esos miembros de las comunidades escolares», finalizó.
