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Bachelet sale al rescate de reforma de pensiones y pacto fiscal del Presidente Boric PAÍS Crédito: Agencia Uno

Bachelet sale al rescate de reforma de pensiones y pacto fiscal del Presidente Boric

Las palabras de la exmandataria fueron interpretadas como un intento de salvataje a dos proyectos emblemáticos del Gobierno de Gabriel Boric y que se encuentran entrampados, por la falta de entendimientos entre el oficialismo y la oposición en el Congreso. La reforma de pensiones cumplirá en noviembre un año desde su ingreso en al Congreso y en los últimos meses se entrampó su discusión con la derecha en materias técnicas y políticas. “Mejorar la vejez, eso es lo que debe primar y nos debe unir. No hay que ser ingenuos, para que esta reforma se apruebe en el Congreso, se requiere alcanzar el Quórum Calificado”, sostuvo Bachelet. Como en sus mejores tiempos de campaña, la expresidenta improvisó un grito que sacó aplausos en la audiencia. ¡Queremos acuerdo nacional! ¡Queremos un acuerdo nacional para las pensiones!


En una actividad con adultos mayores en Macul, encabezada por el Presidente Gabriel Boric, la invitada estelar fue la exmandataria Michelle Bachelet. La socialista, y excomisionada para los DDHH de la ONU, como en sus mejores tiempos de campaña, defendió en su discurso la urgencia de consensuar una reforma de pensiones y el pacto fiscal en medio de aplausos de la concurrencia.

Sus palabras fueron interpretadas como un intento de salvataje a dos proyectos emblemáticos del Gobierno y que se encuentran entrampados, por la falta de entendimientos entre el oficialismo y la oposición en el Congreso. La reforma de pensiones cumplirá en noviembre un año desde su ingreso en al Congreso y en los últimos meses se entrampo su discusión con la derecha en materias técnicas como políticas.

“Mejorar la vejez, eso es lo que debe primar y lo que nos debe unir. El gobierno lo que está haciendo es tener una mirada de Estado, de pensar en las personas, de pensar en ustedes. Y eso es lo que debe primar en todos los sectores políticos”, comenzó diciendo Bachelet.

Para luego enfatizar: “No hay que ser ingenuos, para que esta reforma se apruebe en el Congreso, se requiere alcanzar el Quórum Calificado, y sabemos que hoy día el parlamento está muy fragmentado. Por lo que necesitamos que todos puedan tender puentes unos con otros y centrarse en ustedes, en el interés de las pensionadas y pensionados. Es una buena señal que un conjunto transversal de 18 fuerzas políticas del país haya acogido este llamado de la ministra Jara y formaron parte de una mesa técnica justamente para llegar a ese acuerdo”.

Bachelet había defendido en junio la urgencia de la reforma de pensiones y el en PS esperaban una nueva defensa de la medida que se encuentra empantanada desde hace meses. En lo técnico, sectores de Chile Vamos se oponen a dos de los tres pilares de la reforma: creación de un seguro social de 6% con cargo al empleador y el fin del modelo de las AFP. Aunque apoyan fortalecer la PGU.

En lo político,  la UDI se retiró de la mesa técnica para la reforma, lo que llevó a suspenderla la instancia y Chile Vamos rechaza que del seguro social del 6%,  la mitad vaya a un fondo solidario.

Mientras la UDI analiza llevar algunos capítulos al Tribunal Constitucional, un sector gremialista lo condicionó a la renuncia de Giorgio Jackson y finalmente Chile Vamos se restó de reunirse con el ministro de Hacienda, Mario Marcel.

La expresidenta defendió a Marcel, al pacto tributario, y puso una dosis de humor, para recalcar la necesidad de persuadir a la derecha a conseguir un consenso: “Y nosotros deberíamos inventar así como un grito, ¡queremos acuerdo nacional! ¡queremos acuerdo nacional! ¡queremos un acuerdo nacional para las pensiones!”, sacando un aplauso cerrado entre el público.

Luego agregó con un lenguaje coloquial como el que exhibía en su última campaña hace 10 años: “Pero tenemos que añadirle otra cosita, chiquillos, porque para esto necesitamos luquitas. Así que necesitamos un pacto fiscal. Que llegue el dinero para que el gobierno lo pueda llevar adelante y las pensiones se mejoren ahora, no más adelante”, dijo Bachelet.

“Había un arzobispo de Sudáfrica, Desmond Tutu, a quien le copió una frase. Él decía, yo soy rehén de la esperanza. Y yo soy prisionera de la esperanza. No quiero perder la esperanza de que podamos mejorar las pensiones de todos ustedes”, aseguró sacando nuevamente gritos de aprobación entre la multitud.

Con total espontaneidad y relajo, la expresidenta dejó de lado su discurso de ocho páginas en la mitad e improvisó:  “Amiga y amigos, mejorar las pensiones actuales y futuras es un imperativo vital, moral, ético, pero también de cohesión social. Y existe, yo creo y espero, existe un amplio consenso sobre ella. Y es en base al diálogo y a los acuerdos, la única forma de avanzar como país respecto al derecho a una vida digna en la vejez”.

No podemos -agregó- “ser indiferentes a que la tercera edad sea sinónimo de pobreza, que es la realidad que muchas y muchos enfrentan hoy día. Y en paralelo debemos encontrar un camino que nos permita reconocer el valor de la mujer en la sociedad. Porque son ellas, nosotras, postergando muchas veces su pensión futura, se hacen cargo de labores de cuidado que tanto se requiere. Por lo tanto quiero reiterar que con la reforma provisional no gana un grupo, ganamos todos”, terminó su discurso.

Sus palabras emergen luego de que Gobierno inició en los últimos días un esfuerzo por impulsar la reforma previsional y explicarla en grupos de la sociedad civil, como forma de presión dirigido a la derecha, en medio un quiebre en las conversaciones con la oposición.

Además, la estrategia de La Moneda apunta a posicionar la iniciativa de cara a la próxima presentación de indicaciones y votación en la comisión de Trabajo de la Cámara de Diputados, para lo cual Ejecutivo afinará estas modificaciones durante la próxima semana que es distrital y así comenzar su revisión en la instancia legislativa desde el 21 de agosto.

En la oposición sus palabras, hasta ahora, no han sido recibidas con particular entusiasmo. En Renovación Nacional, el diputado y miembro de la comisión, Frank Sauerbaum, recordó la postura que tuvo el Presidente Boric como diputado durante la tramitación de la reforma propuesta por la exmandataria.

“Yo le diría a la expresidenta Bachelet que se acuerde que el diputado Boric votó en contra de su propia reforma y hoy día el Presidente Boric busca un salvavidas en la figura de la expresidenta Bachelet,”, expresó el parlamentario.

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