El sábado pasado «Cuba libre», libro de la cubana Yoani Sánchez, le hizo pasar un mal rato al chileno Maximiliano Raide.
Ese día, el presidente de Jóvenes Líderes (organización en la que participa Jorge Alessandri, uno de los profesionales a cargo de programación en La Moneda), llegó a la Isla y fue detenido en el aeropuerto cuando funcionarios de aduana encontraron en su equipaje el libro de la autora del blog Generación Y, donde escribe sobre la vida en La Habana.
Reconocida con el premio de Periodismo Ortega y Gasset y catalogada por revista Time como una de las 100 personas más influyentes del mundo, Sánchez se ha convertido en un «dolor de cabeza» para las autoridades cubanas, que no ven con buenos ojos sus posteos que muestran la cara no oficial de la «Revolución». Debido a ello, su libro está prohibido en la Isla. Algo que el joven chileno desconocía cuando pisó suelo habanero y pasó varias horas retenido antes que la policía le dejara ir, no sin antes decomisar la copia de «Cuba libre» que llevaba.
