Ser un pueblo “privado” no es un regalo. Entre otras cosas, no se pueden realizar obras de equipamiento, ni de urbanización, como construir espacios públicos, pavimentar las calles o ampliar el alumbrado. Tampoco se puede postular a ninguna oferta pública del Estado o a subsidios que impliquen ser dueño de un terreno.
“Caleta del Sol”. Así se llama la nueva teleserie que TVN emitirá a las 20:00 horas y que tiene de protagonistas a Carolina Arregui, Francisco Melo y Gonzalo Vivanco.
El lugar elegido para las grabaciones es Chañaral de Aceituno, una pequeña caleta ubicada a unos 20 kilómetros de Punta de Choros, en el límite de la Región de Atacama. Un pueblo que tiene una singularidad: no pertenece al Estado ni a sus pobladores. Su dueño es el senador RN Baldo Prokurica.
El pequeño poblado, ubicado en la comuna de Freirina y donde viven unas 200 personas, pertenece a los cuatro hermanos Prokurica a través de la Sociedad Agrícola Konavle, que hace diez años inició un litigio contra el fisco.
Ser un pueblo “privado” no es un regalo. Entre otras cosas, no se pueden realizar obras de equipamiento, ni de urbanización, como construir espacios públicos, pavimentar las calles o ampliar el alumbrado. Tampoco se puede postular a ninguna oferta pública del Estado o a subsidios que impliquen ser dueño de un terreno.
De esta forma, la mayoría de los pobladores –al menos un centenar– tiene sus casas sin título de dominio. Mientras tanto, viven en un pueblo que sienten suyo pero que no les pertenece, y donde el fisco no puede intervenir, por lo que lo han ido mejorando con sus propios medios. Como los arreglos al pequeño muelle, que han corrido por iniciativa y cuenta de los pescadores.
La gran esperanza en la caleta para convertirse en un pueblo normal, donde cada uno sea dueño de su terreno y los espacios comunes puedan utilizarse indefinida y legalmente, se centraba en tribunales.
Pero el pasado 12 de julio, y luego de 10 años, el Cuarto Juzgado de Letras de Copiapó cerró esta vía, ya que acogió la demanda de Prokurica declarando que la Sociedad Agrícola Konavle es la dueña exclusiva de los terrenos donde se encuentra Chañaral de Aceituno, denominado “Estancia de Chañaral Lote Norte”.
La sentencia, que fue apelada por el Consejo de Defensa del Estado, señala que se deben cancelar los registros de propiedad conservatoria de la municipalidad de Freirina involucrados.
No solo eso. El Juzgado condena al fisco “a la restitución de todas las propiedades que ocupa por sí o por terceros a su nombre, libres de todo ocupante y que se encuentren ubicadas dentro de los deslindes que figuran en las inscripciones de fojas 37vta. N° 23 y fojas 311 N° 107 ambas del Registro de Propiedad del Conservador de Bienes Raíces de Freirina del año 1980, referidas a los planos N° III-3-166 C. R. y N° III-3-423 C. R., dentro de tercero día de ejecutoriada la sentencia que se dicte en autos”.
El alcalde de Freirina, César Orellana, asegura que esta es una pésima noticia para los pobladores. Por una parte porque lo que pasará con ellos y su pueblo queda en manos del senador Prokurica y, por otra, porque tras la apelación del CDE podrían estar años nuevamente esperando un resultado, por lo que continuarán en el limbo en el que han permanecido durante más de una década.
