En Palacio tomaron nota de la sensible fibra que tocaron en el gremialismo con el criterio que se aplicó en el ajuste ministerial de privilegiar figuras ligadas al piñerismo duro y, por lo mismo hay conciencia de que la decisión de sacar o enrocar subsecretarios debe ser minuciosamente analizada, para evitar, así, encender nuevamente la hoguera que aún quema en la interna.
La tormentosa semana que vivió el oficialismo y principalmente el Gobierno tras el ajuste de gabinete, por el conflicto político que provocó entre la UDI y RN, llevó a La Moneda a «congelar» por ahora la decisión de cambiar piezas en el elenco de subsecretarios.
Es que la frágil pax romana entre los principales partidos de Chile Vamos no resiste otra pugna por las cuotas de poder y equilibrios políticos en el seno de la actual administración.
En Palacio tomaron nota de la sensible fibra que tocaron en el gremialismo con el criterio que se aplicó en el ajuste ministerial de privilegiar figuras ligadas al piñerismo duro y, por lo mismo, hay conciencia de que la decisión de sacar o enrocar subsecretarios debe ser minuciosamente analizada, para evitar, así, encender nuevamente la hoguera que aún quema en la interna.
“Una eventual compensación a la UDI, sería dar cuenta de que se cometió un error en el cambio de ministros”, aseguró un parlamentario de Chile Vamos y, si bien en el partido liderado por Jacqueline van Rysselberghe así lo esperan, saben que la maniobra no puede ser tan evidente, pues, en medio del proceso de negociación para ingresar las reformas de pensiones y tributarias, una nueva lucha interna es un lujo que la administración piñerista no se puede dar.
A fines de la semana pasada se habría dado la señal interna a los subsecretarios respecto a que, por ahora, no habría cambios.
El Presidente Sebastián Piñera se encuentra fuera de Chile toda esta semana, de gira por Israel, Palestina y Japón, un hecho que demora la decisión sobre qué subsecretarios cambiar, ya que, si bien el Vicepresidente, Andrés Chadwick, podría llevar a cabo dicha operación, al ser este un reconocido militante UDI podría tensionar a cualquiera de los dos partidos en conflicto, al sentirse perjudicados
