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Eléctrico vs. combustible: Casi $400.000 de diferencia en costos de mantención Movilidad

Eléctrico vs. combustible: Casi $400.000 de diferencia en costos de mantención

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Según Enel X, recorrer 400 km puede costar $84,000 en un vehículo electrificado, mientras que en un auto común le costaría $155,000 CLP, lo que supone un ahorro del 46% en energía.


En 2023, en Chile se vendieron 9.336 autos eléctricos y según la Universidad de Chile, se espera que para 2030, haya más de 80 mil de estos automóviles a nivel nacional. Recientemente, el país dio a conocer que dejará de vender vehículos a combustible para 2035, siendo la primera nación de Latam en determinarlo.

La comparación entre los eléctricos y de combustión interna ha evolucionado rápidamente en los últimos años, especialmente en términos de costos. Un estudio de Enel X, el cuidado anual de uno de estos, puede costar $100.000, mientras que para un automóvil de combustión puede alcanzar los $470.000.

“Si bien, históricamente los vehículos eléctricos eran más costosos, esta brecha se ha reducido significativamente. El valor inicial varía según la marca, modelo y autonomía. Otros factores que inciden, son la disponibilidad y conveniencia de las estaciones de carga, la autonomía, los incentivos fiscales y el valor de reventa”, señaló Manuel Parraguez, gerente general de Gama Mobility.

De acuerdo al ejecutivo, a pesar de un precio inicial más alto, el costo total de un auto eléctrico suele ser más bajo a largo plazo, debido a los bajos valores de operación y mantenimiento. Actualmente, los automóviles eléctricos y los de combustión presentan diferencias notables en cuanto a costos operativos y de mantenimiento, aunque ambos tienen ventajas y desventajas según el contexto.

Los vehículos eléctricos tienden a tener un costo de adquisición más elevado debido al precio de las baterías y la tecnología avanzada que incorporan. En comparación, un vehículo normal suele ser más económico al momento de la compra. Sin embargo, los primeros reciben incentivos fiscales y descuentos en impuestos y mantenimiento en muchos países, lo que reduce la carga económica a largo plazo​.

“A largo plazo, el costo de un eléctrico puede ser mucho mayor, ya que el recambio de las baterías es un tema poco explorado, que todo indica que el valor es alto y generará contaminación, si es que no se hace una política de reciclaje al respecto. El costo de eficiencia de las baterías va a converger el 2030”, afirmó Parraguez.

Los eléctricos requieren menos mantenimiento debido a la menor cantidad de partes móviles. No necesitan cambios de aceite, filtros y correas, lo que reduce significativamente los costos anuales. Asimismo, dijo Parraguez, el desgaste de los frenos es menor en los eléctricos, ya que muchos modelos cuentan con sistemas de frenado regenerativo.

“Lo que necesitamos, es que Chile tenga mejor y mayor infraestructura para carga de vehículos eléctricos, y que la adquisición e instalación de cargadores domésticos sean más económicos, y que haya verdaderos incentivos fiscales para las empresas, que obtienen vehículos eléctricos y no necesariamente de trabajo como camionetas y furgones. Ante ello, cabe preguntarse si Chile está preparado para tener un parque automotriz totalmente eléctrico para el 2035”, finalizó Manuel Parraguez.

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