Viajes
Con playas de aguas cristalinas y una mezcla única de influencias europeas y caribeñas, Curazao se presenta como un destino ideal para todas las edades, con una diversidad de actividades para satisfacer diferentes intereses.
Con la llegada del verano y la emoción por las vacaciones creciendo, hay lugares no tan populares en nuestro país pero que cuentan con todos los requisitos para llenar de experiencias inolvidables a las y los viajeros.
Curazao es un país autónomo dentro del Reino de los Países Bajos y, junto con Aruba y Bonaire, constituye las islas “ABC” o Antillas de Sotavento. Esta pequeña isla en el sur del Mar Caribe está bicada a solo 12° al norte del ecuador.
La isla se distingue por ser un destino fuera de la zona de huracanes, disfrutando de un clima veraniego durante todo el año, con una temperatura promedio de 29°C.
Tiene un clima cálido y soleado durante todo el año, y cuenta con más de 35 playas, lo que lo hace un destino ideal para el relajo.
Las y los turistas pueden sumergirse en un mundo de aventuras, desde buceo y snorkeling hasta experiencias nocturnas, visitas a islas desiertas, recorridos en barco y la exploración de la rica vida marina de la isla.
Un área cubierta de corales que es un paraíso para los buzos es Kabes di Baranka (“la cabeza de la piedra”). Además hay diversos arrecifes y paredes densamente cubiertos con corales y gorgonias.
Además, de la naturaleza, la isla se caracteriza por su arquitectura monumental y colonial. En 1997, Willemstad fue catalogado como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, convirtiéndose en una de las 5 capitales del Caribe en esta lista.
Hay diversos paseos arquitectónicos a pie, que incluyen un recorrido por la parte antigua de la ciudad. Además las zonas de Punda y Otrobanda cuentan con importantes restaurantes, arquitectura vibrante y coloridas y lujosas tiendas.
Además, su ambiente seguro y acogedor invita a las y los turistas a explorar sus calles, cafés y restaurantes, conectándose con la naturaleza y disfrutando de experiencias únicas.
Además, su animada vida nocturna ofrece opciones para jóvenes y adultos, con eventos y festivales a lo largo del año que añaden un toque especial a la experiencia. Además la gastronomía ofrece cócteles en un entorno histórico y acogedor entorno, con sabores helados locales o una deliciosa comida caribeña.
Por ejemplo, una visita a la pequeña destilería del Licor de Curazao es un recorrido por la historia local. Allí se puede conocer los licores de la Casa Senior y disfrutar de su sabor único, tal como se hace ya desde 1896.
