El Pentagate vuelve a abrir el baúl que esconde la sagrada unión entre el dinero y el poder en nuestro país.
La investigación del caso fraude al Fut del grupo Penta abrió una arista política, luego que saliera a la luz que el banco -ligado fuertemente a la UDI- utilizaría boletas falsas para financiar campañas y así aprovechar de eludir tributos.
El fiscal Carlos Gajardo, quien lleva el caso, está esperando en el área chica que el Servicio de Impuestos internos presente la demanda correspondiente y le tire la pelota para hacer el gol, con el que se profundizaría la investigación y que podría revelar la zona más oscura de la política chilena: los aportes reservados a los candidatos.
El director del SII, Michelle Jorrat tiene un cuchillo de doble filo en sus manos, ya que si realiza la demanda, generaría una avalancha política que alcanzaría a todos los actores del sistema, sobre todo a la UDI, destapando el corazón financiero del partido gremialista.
