Educación
La canasta estaba compuesta por alrededor de 12 productos distintos y en su lugar fue reemplazada por una canasta con solo tres alimentos.
Estudiantes, tutores y docentes que imparten Educación para Jóvenes y Adultos (EPJA) denunciaron la eliminación de una canasta de alimentos que hasta el año pasado los estudiantes de dicho centros recibían.
Esta canasta estaba compuesta por leche fresca, legumbres, fruta, verdura, jurel, arroz, harina, huevos, entre otros. En total alrededor de 12 productos que en su lugar fueron reemplazados solo por tres de estos en una caja catalogada como «canasta diferenciada» que consta de 6 huevos, 3 litros de leche y 450 gramos de avena.
Quienes se benefician del programa CEIA son una población diversa que llega tanto a adultos y jóvenes desde los 14 años que tienen un alto grado de vulnerabilidad y son catalogados como estudiantes prioritarios.
«Nos parece una acción extremadamente discriminatoria de parte de Junaeb para con los y las estudiantes de educación EPJA. No compartimos el momento en el que fue comunicado el cambio de su política, en algunos casos, la misma semana donde los y las estudiantes recibirían la ayuda. Ayuda con los que ellos y ellas contaban para enfrentar la pandemia», declaró Sibila Cid, profesora de Historia, Geografía y Educación Cívica de CEIA en Río Bueno, Región de Los Ríos.
“Por otra parte, nuestra población son principalmente estudiantes desertores de la educación regular por diversas razones. Esto no es un problema menor, sobre todo en este periodo de pandemia. Actualmente las cifras de deserción escolar se han incrementado. Aunque suena frio señalarlo las canastas representaban hasta el año pasado un factor significativo de retención escolar”, agregó.
La situación ha afectado a diversos establecimientos del país. Trabajadores de la educación municipal de Viña del Mar junto al Colegio de Profesores regional emitieron una declaración publica conjunta donde aseguraron que el programa de alimentación de la Junaeb para los estudiantes que se acogen a este beneficio «constituye un factor protector para la retención escolar».
«Esta grave situación [la modificación de la canasta] no sólo perjudica a los miembros más vulnerables de esas comunidades, afectados por esta crisis sanitaria, sino que además demuestra indolencia y desprecio a sus necesidades, en tiempos en que se espera de la autoridad señales de empatía y solidaridad, a la que apelamos, esperando que este acto de injusticia y mezquindad se revierta en lo inmediato».
La respuesta de Junaeb hasta ahora es que entienden que “los cambios han generado confusión y molestias, ya que las canastas de alumno regular contienen más productos y fueron recibidas por adultos en los ciclos pasados en aquellos establecimientos con modalidad mixta (regular + adultos). Sin embargo, con el fin de entregar a cada estudiante lo que le corresponde según su beneficio, Junaeb se encuentra actualmente regularizando este proceso”.
En su defecto, un grupo diputados -Gonzalo Winter, Cristina Girardi, Juan Santana, Camila Vallejos, Camila Rojas y Mario Venegas- solicitaron en un documento oficial que se oficie al Ministerio de Educación (Mineduc) respecto de los hechos mencionados.
“No compartimos el carácter de esta medida, que no toma en cuenta el perfil de los y las estudiantes a las que impacta, desconociendo que los CEIA acogen a migrantes, padres y madres adolescentes, jefas de hogar y personas de la tercera edad, entre otras poblaciones vulnerables, que con la aplicación de esta reducción considerable en el beneficio, tendrán un impacto económico y nutricional relevante”, indicaron en el documento.
A la petición anterior se le añade la diputada Claudia Mix, quien solicitó restablecer la cantidad de víveres que constituía la caja de mercadería durante el año 2020 otorgada a las y los estudiantes de los Centros de Educación Integrada de Adultos, además de esclarecer el periodo de tiempo que se destina para la entrega de cajas de mercaderías.
