Sustentabilidad
Científicos y científicas de la Facultad del Mar de la Universidad Católica del Norte estudiaron diversas estrategias para combatir las consecuencias del cambio climático. En el análisis, indicaron que algunas de las formas para reducir el impacto de la crisis es la creación de Áreas Marinas Protegidas, educar a la población respecto a temas medioambientales y la instauración de políticas públicas.
El Panel Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) dio a conocer un alarmante informe sobre el cambio climático y sus consecuencias, las cuales desde hace tiempo se conocían como perjudiciales para el mundo. Debido a lo anterior, expertos de la Universidad Católica del Norte (UCN) se hicieron diversas preguntas sobre qué hacer para mejorar la situación actual.
Actualmente la sequía es lo más visible de la crisis y las temperaturas extremas es lo que más se siente, sin embargo, los océanos han sido fuertemente afectados por el cambio climático.
Carlos Geymer, director Núcleo Milenio Ecología y Manejo Sostenible de Islas Oceánicas y Académico de la UCN, afirmó que junto al aumento de la temperatura hay una mayor frecuencia e intensidad de grandes fenómenos tipo marejadas, que ocurren en el océano y afectan la costa.
Esto significa que hay zonas donde el mar le ha ganado terreno al continente, lo que implicaría que hay destrucción de infraestructura y que hay menos días hábiles para trabajar en la costa, ya sea en pesca o actividad portuaria.
Debido a lo anterior, el experto aseguró que la principal forma para reducir el impacto del cambio climático en los océanos es la creación de Áreas Marinas Protegidas (AMPs), las cuales son grandes captadoras de CO2 atmosférico y, además, protegen la costa, a sus comunidades de las tormentas y a las especies que migran por el cambio climático.
Por eso, recalcó el científico, en el centro-norte de Chile es fundamental avanzar en la creación del Área Marina Protegida “Archipiélago de Humboldt”, zona reconocida a nivel mundial y que hace 17 años se trata de proteger, con una aprobación unánime del Consejo de Ministros para la Sustentabilidad.
Con respecto a los efectos de continuar sin cambios, la oceanógrafa de la UCN y secretaria de Investigación, Extensión y Asistencia Técnica de la Facultad de Ciencias del Mar, Práxedes Muñoz, destacó que terminando el siglo podría aumentar en tres grados la temperatura promedio, lo que implicaría una disminución del pH del agua afectando la oxigenación de las aguas de fondo y a los organismos marinos.
Sobre qué hacer frente a esta situación, Muñoz agregó que “debemos pensar cual es nuestro rol como país en este tema, somos un país pequeño, pero somos grandes consumidores. Es hora de que nos eduquemos en estas temáticas, que entendamos cual es nuestro rol como ciudadanos y qué podemos hacer para reducir las emisiones”.
La solución, dijo, es reducir en parte el consumo y utilizar energías limpias, se puede aportar a reducir las emisiones con acciones como disminuir el consumo de diversos productos, evitar producir productos que sean de corta vida y que las empresas indiquen cuál es su huella de carbono de sus productos para poder decidir responsablemente como consumidores.
Luego que el planeta se declarara en “sobregiro ecológico”, el Doctor en Ciencias en Ecología y Académico del Departamento de Biología Marina de la Facultad Ciencias del Mar de la UCN, Julio Vásquez Castro, resaltó que Chile es un país que vive de la explotación y exportación de los recursos naturales, por lo que una mejor estrategia es aumentar su valor agregado y consecuentemente disminuir las emisiones de contaminación.
“Debemos generar políticas públicas que nos permitan a nivel país, disminuir las emisiones, mejorar nuestro ecosistema a nivel global, por lo que como país estamos expectante en cómo incorporamos estas políticas públicas en la nueva constitución, el cuidado de nuestros recursos naturales y cómo los usaremos en el futuro, cómo cambiamos nuestra matriz energética y hacemos más interconexiones con energías renovables”, concluyó.
Luego del informe de la ONU, no solo expertos han estado alarmados por la situación. Diferentes comunidades y organizaciones se han manifestado a través de redes sociales para promover un cambio a nivel mundial que ayude a revertir la situación actual.
