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Cada día son más los viajeros que se atreven a salir al mundo. Y estos testimonios demuetran que, para hacerlo, lo más importante es tener ganas y espíritu de aventura.
Hace algunos días Faro, la comunidad de viajeros chilenos, mostró las historia de «Casándonos por el Mundo», «De Alaska a Patagonia», «Nosotros los Viajeros», «Upa Chalupa!» y «PatiPerros», viajeros chilenos que dejaron la rutina de lado para irse a viajar por el mundo.
Después de publicar ese artículo se dio cuenta de que faltaron unas cuantas buenas historias. Y, como se trata de experiencias dignas de compartir, las recopiló en esta nota:
1 Espiral en Ruta
El sueño nació en Pichilemu con un objetivo claro: “Viajar por Latinoamérica en una casa rodante, haciendo arte, trabajo social y terapias holísticas”. Así fue como Karen y Martín decidieron comprar una Chevrolet C20 Custom Deluxe del ’79, en la que no sólo viajarán ellos, sino también su hijo Alonso y su perra Amandra.
La idea es partir desde Santiago rumbo al norte de Chile, para luego pasar por la costa de Perú, Ecuador y Colombia en un recorrido que esperan les tomará un año y medio, al que llamarán Proyecto Espiral en Ruta.
Sus profesiones les permitirán viajar haciendo terapias de salud integral –como reiki, masoterapia y digitopuntura, entre otras–, realizando expresiones artísticas y desarrollando talleres y charlas sobre conciencia social, desarrollo personal y ecología.
2 Viajando Lento
Nicole Etchart está viviendo la primera patita de su sueño de convertirse en lo que ella llama una “nómade digital”. De cumplirse, podrá hacer las dos cosas que más le apasionan: viajar y escribir.
Hasta el momento su trabajo sólo le había permitido juntar algunos días al año para escaparse a conocer Sudamérica. Pero ahora quiso dar el primer salto para hacer realidad su objetivo, por lo que le pidió a su jefe siete meses sin goce de sueldo para irse a recorrer el Sudeste Asiático. Quiere mantener su trabajo hasta que su blog Viajando Lento le dé los recursos necesarios para vivir viajando.
Aprovechó los kilómetros acumulados para canjear el pasaje, tomó su mochila y desde Australia partió rumbo a Filipinas, Singapur, Malasia y Tailandia, donde se encuentra actualmente. “Después, no sé. Viajo libre y en el camino voy viendo”, dice.
3 Fotografiando el Mundo
En octubre de 2015 Sebastián Miranda y la Carmencha, su fiel Combi, partieron rumbo al sur de Chile hasta llegar a Ushuaia, en Argentina, desde donde emprendió rumbo al norte de América, para cumplir su sueño de llegar manejando hasta Alaska.
En siete meses ha pasado por 151 lugares, ha recorrido más de 14.000 kilómetros y se ha mantenido gracias a la venta de poleras para hombre y mujeres, que llevan el logo de Fotografiando el Mundo, como bautizó a su hazaña.
Actualmente Sebastián se encuentra en Montevideo, tras haber manejado una gran ruta que puedes ver aquí. Si estás en Uruguay y quieres comprarle una polera para ayudarlo a seguir cumpliendo su sueño, puedes contactarlo a través de su fan page.
4 Rueda al Sur
La aventura de Christian Amigo partió en Vancouver un 14 de mayo de 2015, donde, con sólo una bicicleta, se propuso el objetivo de volver a sus tierras –él es de Puerto Varas– e incluso más allá, alcanzando Punta Arenas.
Hace pocos días cumplió un año viajando y por fin llegó a tierras locales. Pero antes tuvo que pasar por Estados Unidos, México, Honduras, Belize, Guatemala, El Salvador, Nicaragua, Costa Rica, Panamá, Colombia, Ecuador y Perú hasta llegar a Arica, donde cumplió uno de sus sueños más inmediatos: comerse un churrasco.
Christian no es millonario. De hecho, ha logrado mantenerse con un presupuesto diario de $2.500 que, al llegar a Chile, se le terminó. Por eso, si quieres ayudarlo a lograr el objetivo de llegar hasta la Región de Magallanes, puedes ingresar a su fan page, donde él mismo da opciones para colaborar con su viaje.
