Foro Liderazgo: La apuesta de Ilan Senerman por la comida chilena con La Mensajería

Ilan Senerman estudió Antropología en Estados Unidos, pero hoy se dedica principalmente al emprendimiento en el área de la gastronomía. Trajo desde España el restorán de tapas 100 Montaditos y hoy se la juega por la comida chilena con La Mensajería y además es Director ejecutivo de Senfoods.

En un nuevo capítulo de Foro Liderazgo, conducido por Max Raide de El Mostrador, Ilan Senerman habló sobre el emprendimiento en Chile y la escena gastronómica del país.

Respecto del emprendimiento en el país, Senerman destacó que faltan incentivos para que las personas se atrevan a emprender. «El sistema no esta bien diseñado para fomentar el emprendimiento, porque creo que es más difícil que en otros países. Sobre todo por la burocracia. El sistema público funciona a una velocidad que no va de la mano con el emprendedor», explica.

«Los papeles, las leyes, los permisos, demoran cantidades eternas a veces y eso para una persona que tiene un monto limitado de plata y que necesita rendir y lograr cosas importantes en corto plazo, le juega en contra», agrega Senerman.

En ese sentido, el socio de La Mensajería también cree que algunas leyes y políticas públicas tampoco ayudan a ciertas iniciativas en el área gastronómica, como por ejemplo el de los Food Trucks o carritos de comida, que requieren menos inversión pero tienen muchas restricciones para funcionar. «Hoy si bien ilegalmente puedes vender comida en la calle, legalmente es imposible. Entonces un Food Truck tiene que vivir de los eventos y festivales de música. Hay que tener una estructura bien particular para poder sobrevivir en el mundo de los food truck hoy día», dice.

Respecto de su último emprendimiento, el restorán La Mensajería, el director ejecutivo de Senfoods cuenta que surgió con la idea para impulsar la comida chilena. «Estudié Antropología y me dediqué a estudiar el desarrollo de la comida chilena. Me daba un poco de pena que acá la gente este tan motivada con la cocina peruana, francesa, italiana, cualquier cosa que no sea la chilena. De hecho la chilena se relegó un poco a las picadas, a las periferias y la gente lo veía incluso como una comida rasca», dice.

«Lo que queríamos con la mensajería era poner la cocina chilena donde se merece,y crear una ambiente con diseño y los mas altos estándares de calidad, para poder lograr que los chilenos y los extranjeros se motiven a disfrutar la comida chilena a la par que cualquier otra gastronomía internacional», agrega.