Inclusión
“Cuando un hijo es diagnosticado con Asperger es importante contar con una red de apoyo de especialistas de distintas disciplinas lo más tempranamente posible que ayuden con el desarrollo y tratamiento e interacción con sus pares, además es importante el crecimiento y cuidado de toda la familia”, afirma psicóloga.
Ser padres por primera vez ya es un desafío y cuando el hijo necesita un cuidado especial puede ser un reto muy diferente para vivir como individuo y como pareja. Tal es el caso del Síndrome de Asperger, trastorno del espectro autista, que se encuentra desde el nacimiento.
Identificar a un niño con estos síntomas no es difícil, de hecho se presentan síntomas tempranos muy comunes como la dificultad para la interacción social y comunicación, las rutinas repetitivas, necesidad de rituales, y la inflexibilidad. Además de mostrar preocupaciones y rangos estrechos de intereses.
Pero, ¿cómo tratar a un niño con Síndrome de Asperger? es la pregunta que frecuentemente ronda cuando a padres, sobre todo primerizos, se les informa que su pequeño está diagnosticado con dicho trastorno.
Porque, tal como afirma la psicóloga de Clínica Indisa, María Susana Abarca, la llegada de un hijo puede cambiar todas las dinámicas familiares, tenga o no alguna dificultad de desarrollo o aprendizaje.
Sin embargo, “cuando un hijo es diagnosticado con Asperger es importante contar con una red de apoyo de especialistas de distintas disciplinas lo más tempranamente posible además de familiares, amigos y asociación de padres con hijos con Asperger y no solo que ayuden con el desarrollo y tratamiento e interacción con sus pares, además es importante el crecimiento y cuidado de toda la familia”, indica la especialista. Esto incluye a hermanos, abuelos y cualquier otra figura cercana.
Además, para tratar esta condición, siempre se debe buscar apoyo de un equipo médico integral, que asista al menor desde muy pequeño, con el fin de desarrollar al máximo sus habilidades. El staff involucrado puede integrar desde fonoaudiólogos, kinesiólogos y terapeutas ocupacionales, hasta psicólogos clínicos y médicos de atención primaria, entre otros.
La psicóloga también recomienda que los padres tengan siempre en mente un espacio para la vida de pareja. “Muchas veces puede sonar como algo obvio, pero es necesario que los padres recuerden cómo nacieron como pololos y pareja, de dónde vino su deseo de tener un hijo y de ser felices”, agrega.
Asimismo, cada uno debe seguir siendo un individuo con intereses propios y no volcarse solo al hijo y sus necesidades, porque como menciona Maria Susana Abarca, “todos los sueños que tengan como padres para su hijo siguen siendo posibles, y es importante que se mantengan las fuerzas para poder superar cualquier obstáculo que venga”.
Por último, la especialista entrega alguna sugerencias que se deben considerar al momento de criar a un niño con Síndrome de Asperger:
