Luego de una reunión de trabajo en el Club de La Unión de Santiago, el ministro de Justicia, Felipe Bulnes, y su par argentino, Julio Alak, firmaron un protocolo modificatorio que permitirá acelerar el proceso legal para el traslado de personas condenadas entre ambos países.
El acuerdo introduce cambios al «Tratado de Nacionales Condenados y Cumplimiento de Sentencias Penales», suscrito entre ambos gobiernos en octubre de 2002, y que rige en nuestro país desde el 30 de junio de 2005.
El documento establece que los antecedentes por solicitudes de traslado que se remiten desde Chile a Argentina o viceversa deben realizarse a través de la embajada del país trasandino y de su Ministerio de Relaciones Exteriores, para posteriormente ser remitida al respectivo Ministerio de Justicia en Buenos Aires.
Para evitar este procedimiento, que llega a demorar la recepción de antecedentes en hasta tres meses, ambas autoridades acordaron la modificación, lo que permitirá una comunicación directa entre los respectivos ministerios. Con ello, los plazos se reducirían a no más de tres semanas.
«Este tratado acelera y hace más expedito el traslado de condenados entre ambos países, para que puedan cumplir su condena en el país de origen. Creemos que es muy importante que la condena no se extienda a los familiares, y puedan visitar a sus parientes que están cumpliendo sentencia en lugares próximos. Claramente es una ayuda y también favorece las políticas de rehabilitación, porque los condenados tienen que reinsertarse al sistema, y lo lógico es que ese trabajo se comience a planificar pensando en su país de origen», explicó el secretario de Estado chileno.
Al respecto, el ministro Alak dijo que «este convenio nos va permitir avanzar en solucionar un problema de vieja data, que tiene un claro perfil humanitario en cuanto a nuestros alojados en prisión. Va a permitir un rápido traslado de los nacionales que están cumpliendo prisión aquí en Chile, como también en la Argentina hacia el país de origen, para el cumplimiento de la sentencia en un lugar de mayor proximidad para los familiares».
Asimismo, el protocolo modificatorio del tratado reconocerá oficialmente la comunicación a través de mensajería electrónica para la información requerida, sin perjuicio de que paralela o posteriormente se realice el normal despacho de los documentos sobre traslados de condenados.
Con la firma de los ministros Bulnes y Alak, el acuerdo queda en condiciones de ser sometida al denominado trámite ordinario de ratificación en el Congreso del respectivo país, siguiendo los mismos pasos establecidos constitucionalmente para la aprobación de una ley de la República, sin someterlo a discusión de senadores y diputados, pero respetando los respectivos quórum en la sala.
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