Una postura firme y sin dobleces de rechazo categórico a los golpes de Estado en la región es la que debe mantener el gobierno chileno, a juicio del presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de Diputados, Marcelo Díaz (PS), quien con el fin de conocer la postura formal de La Moneda respecto al caso hondureño, citará al Canciller Alfredo Moreno.
Díaz manifestó su preocupación por publicaciones de prensa que indican que el Ejecutivo chileno no tendría, en el fondo, ningún reparo con el gobierno de Porfirio Lobo, al que espera reconocer lo antes posible. «Sería una señal muy negativa, considerando que Lobo fue elegido en unas elecciones cuya legitimidad la comunidad internacional en general no reconoce, ya que se produjeron en un contexto de caos interno en Honduras tras el golpe de Estado que derrocó al Presidente electo Manuel Zelaya», recordó Díaz.
Por ello, consideró fundamental conocer de primera fuente cuál es la postura oficial del gobierno chileno. «Siempre hemos sido partidarios de sostener una sola voz en materia de política exterior, alineados bajo la conducción del Presidente de la República. Sin embargo, es fundamental también que La Moneda escuche la visión de todos los sectores ante un tema que nos parece tiene un fondo decisivo para nuestras relaciones en la región».
El legislador recordó que aún existe un proceso en marcha para dar plenas garantías de estabilización en Honduras y que considera, entre otros, el regreso de Zelaya a ese país, por lo que «apresurarnos a dar una aprobación a una causa aún en desarrollo resulta poco prudente».
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