El vocero de la Corte Suprema, Nibaldo Segura, comentó que casos como el de Cristián López Rocha (37), quien fue sindicado erróneamente como el «violador de Ñuñoa», justifican la exigencia de los jueces hacia el Ministerio Público de pedir la mayor cantidad de antecedentes que acrediten un delito.
En este sentido, Segura, señaló a título personal que «(…) los jueces de Garantía deben decidir con muy pocos antecedentes sobre la privación o no de la libertad y por eso se justifica, y este es un buen ejemplo, el aparente excesivo celo de algunos jueces de Garantía que exigen al Ministerio Público acompañar la mayoría de antecedentes que se solicitan. En la medida que los antecedentes sean más o menos fundados pueden dar objeto a más o menos errores».
El 21 de junio pasado, en una audiencia especial, el juez del 8º Juzgado de Garantía, Luis Avilés, dejó en libertad a López .El beneficio fue resuelto luego que el Ministerio Público diera a conocer el preinforme de ADN que descarta toda participación del acusado en los delitos de violación y abuso sexual, por los cuales se le formalizó el 17 de junio.
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