A raíz de la conformación de la Oficina Marítima en Bolivia y la reciente convocatoria del Presidente Evo Morales a ex mandatarios altiplánicos para definir los pasos a seguir en sus aspiraciones de lograr una salida soberana al mar, los diputados Mónica Zalaquett (UDI) y José Manuel Edwards (RN), advirtieron que esto podría afectar seriamente las relaciones bilaterales con nuestro país.
Durante la administración de Michelle Bachelet, ambos países iniciaron un diálogo bilateral sin exclusiones en 2006. Entre los puntos a revisar incluía la histórica aspiración de una salida al mar por parte del país vecino.
Los legisladores adelantaron que esta instancia podría verse afectada, ya que si optan por el camino multilateral este acto podría terminar con la mesa de negociación existente actualmente y Chile tendría libertad de acción en materia de agenda, mientras que la vía bilateral protege los actuales vínculos existentes entre ambos países.
«Todo litigio que se inicie con organismos internacionales, lo consideramos una vía inamistosa y nos obligaría a revisar integralmente las relaciones, incluyendo los aspectos que no estén directamente relacionados con el cumplimiento de las obligaciones internacionales impuestas por el tratado de 1904», afirmaron los diputados.
Agregaron además, que cualquiera de las instancias por la que opte el Gobierno de Bolivia para intentar concretar una salida al mar, dejaría en libertad de acción a Chile para analizar la continuidad de los actuales acuerdos de cooperación existentes.
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