El jefe (s) de la Dirección General del Crédito Prendario (Dicrep), Rodrigo Montt, destacó los beneficios que ofrece el organismo también conocido como la «Tía Rica», enfatizando que «nuestro servicio desde hace ya varios años mantiene una tasa de interés simple de sólo un 2,5 por ciento, a la cual se agrega al final del préstamo un pequeño porcentaje por concepto de emisión y seguros».
«De esta manera, si una persona recibe 100 mil pesos y vuelve a los seis meses a cancelar su deuda, deberá devolver el dinero recibido más un monto cercano a los 20 mil pesos, harto menos que lo tendría que pagar en un banco», agregó.
La autoridad resaltó, además, que a diferencia de la banca, para la «Tía Rica» no es ningún impedimento prestar plata a «sobrinos» que están en Dicom o que no tienen empleo.
«La persona sólo debe ser mayor de 18 años, tener la cédula de identidad vigente y llevar a alguna de las 19 sucursales que posee la Dicrep en el país una alhaja de oro, platino o de brillantes, o bien un computador o un televisor LCD, por ejemplo, para dejar en garantía a cambio del dinero», precisó.
Montt puntualizó que hoy en día el crédito prendario «es una decisión inteligente de financiamiento, ya que para tener plata fresca e inmediata se recurre a joyas de oro que muchas veces están guardadas en un lugar hasta olvidado de la casa, o bien perfectamente se puede prescindir por un tiempo del televisor o de esa cámara fotográfica que sólo se usa para las vacaciones, para cubrir una urgencia económica».
Cien mil pesos es el monto máximo que da la Dicrep por dejar en garantía una joya y 40 mil pesos por entregar otro tipo de especies. Sin embargo, llevando varias alhajas u otro tipo de objetos, es posible obtener al mes un préstamo de hasta 500 mil pesos, con un límite anual de endeudamiento de hasta un millón 200 mil pesos. El cliente tiene un plazo de cinco meses para saldar su deuda, sumando un mes de gracia, y en el caso de las alhajas puede ampliar ese tiempo por cinco meses más, sumando otro de gracia.
Rodrigo Montt aconsejó a los chilenos a tener cuidado con acudir a los negocios que publicitan préstamos similares a los que entrega la «Tía Rica».
«Esas empresas lo que hacen es comprar la joya de la persona para luego volver a vendérsela, cobrando antes eso sí un interés superior al 10 por ciento mensual, por lo que, lamentablemente, la mayoría de las personas terminan perdiendo sus anillos o pulseras. Acá en la Dicrep hasta llamamos a los dueños para que no se olviden que está por vencer su póliza, porque entendemos que muchas de esas especies tienen un valor sentimental que está por sobre el monetario», añadió.
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