El Índice de Percepción del Consumidor (Ipeco) que elabora mensualmente el Centro de Estudios de Economía y Negocios, CEEN, de la Universidad del Desarrollo (UDD), en conjunto con Mall Plaza, registró una caída de 3,4 puntos en diciembre, situándose en 120,8 puntos. De esta manera el índice cerró el 2011con una caída interanual de 9,2 puntos.
La caída del pasado mes se debió a que el subíndice coyuntural sufrió un retroceso de 26,4 puntos, situándose en los 144 puntos. Por el contrario, el subíndice de expectativas se incrementó en 4,9 puntos, elevándose hasta los 112,7 puntos.
Para entender la caída en el índice coyuntural, comentó la UDD «se debe observar qué sucedió con las variables que lo componen, es decir, desempleo actual y situación económica actual. Ambas sufrieron un deterioro, pero éste fue más acentuado en la pregunta sobre el desempleo actual, ya que la proporción de pesimistas aumentó alrededor de 8 puntos porcentuales (33,1 versus 26,7% en noviembre), y una menor proporción de optimistas (25,1 contra 35,9% en noviembre)».
Con respecto a la situación económica actual, se observó un retroceso de 3,7 puntos porcentuales tanto en la proporción de optimistas (de 35,4% a 31,7), como un aumento de 2,2 puntos en la de pesimistas (de 14,7% a 17%).
Con respecto al índice de expectativas, que es el que pondera las variables de percepción acerca de la situación económica, desempleo e ingreso familiar, contempladas en un horizonte de 12 meses al futuro, «a nivel general experimentaron un avance de 4,9 puntos. En la variable sobre la percepción de la situación económica futura, los optimistas prácticamente se mantienen y los pesimistas disminuyen levemente (6,4 versus 9,2% en noviembre)».
Una situación similar ocurre sobre desempleo futuro ya que los optimistas «aumentan de 30 a 32,2% y los pesimistas disminuyen de 25,8 a 23,2%. Por último, en relación al ingreso familiar futuro, los resultados se muestran mixtos puesto que tanto los optimistas como pesimistas caen de 51,6 a 48,2% y de 9,4 a 8% respectivamente.
Al comparar con diciembre de 2010 se observa que los niveles de pesimismo eran menores en dos de las tres preguntas que componen el índice de expectativas, mientras que los niveles de optimismo eran mayores en las tres preguntas.
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