«La Onemi 2.0, de la cual tanto habló el presidente, nunca existió, seguimos igual, o peor. Después de cuatro años estamos en fojas cero, y no sólo por la fragilidad del sistema de monitoreo sismográfico, recordando los más de 600 equipos sin colocar y aún guardados, sino porque la institucionalidad no ha cambiado y porque el proyecto que envió al Congreso definitivamente no recoge los estándares mundiales en esta materia, muy por el contrario», señaló el diputado Rincón.
Un sistema de emergencias descentralizado, centrado en las personas, en sintonía con los estándares internacionales, que fortalezca la integración, coordinación y colaboración entre instituciones y comunidad, y con un especial énfasis en la prevención, es el modelo que propusieron diputados DC para implementar en el país en respuesta a «la actual vulnerabilidad» que, a juicio de los diputados, «sitúa a Chile en permanente riesgo y peligro».
Así lo informaron el actual jefe de la bancada de diputados DC, Ricardo Rincón, y quien asumirá a partir de esta semana, diputado Matías Walker, quienes dieron a conocer los aspectos centrales del extenso documento que busca modernizar y fortalecer el sistema de emergencias en Chile y que entregaron el año pasado al comando de la entonces candidata Michelle Bachelet; hoy, a sólo dos días de asumir como Presidenta de la República.
«La Onemi 2.0, de la cual tanto habló el presidente, nunca existió, seguimos igual, o peor. Después de cuatro años estamos en fojas cero, y no sólo por la fragilidad del sistema de monitoreo sismográfico, recordando los más de 600 equipos sin colocar y aún guardados, sino porque la institucionalidad no ha cambiado y porque el proyecto que envió al Congreso definitivamente no recoge los estándares mundiales en esta materia, muy por el contrario», señaló el diputado Rincón.
Por lo anterior, el diputado Walker anunció que impulsarán con las nuevas autoridades, comenzando por el Ministerio del Interior, la incorporación de una serie de aspectos en el proyecto en trámite a través de indicaciones a la iniciativa que se encuentra en el Senado.
«Lo ocurrido esta última semana, con una seguidilla de temblores, ha generado una entendible preocupación en la comunidad, y no sólo porque se observan deficiencias en la red de sismológica, sino porque la institucionalidad vigente sigue respondiendo a realidades de hace más de 40 años. Las personas esperaban un fortalecimiento en el sistema de emergencias, expectativa que ha estado lejos de ser cumplida. Esto es la punta del iceberg de un sistema de emergencias que requiere transformaciones sustanciales, que el actual gobierno asumió solo desde lo cosmético pero no desde lo real», agregó Walker.
El documento plantea una serie de medidas que apuntan a contar con un sistema descentralizado y con los recursos necesarios para contar con monitoreos precisos, oportunos y con sistemas de comunicaciones a la altura de las exigencias mundiales.
Además postula una serie de cambios a otras normativas vigentes, para complementar los cambios al actual sistema de emergencias, «de tal forma que los municipios realmente estén empoderados y que el concepto de seguridad pública adquiera el valor que en países desarrollados tiene, pensando en la mejor forma de enfrentar las emergencias».
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