Brasil mantendrá su tasa de interés de referencia por debajo del 10 por ciento durante un récord de ocho años conforme el menor crecimiento le permite a la presidenta Dilma Rousseff cumplir su promesa de reducir los costos crediticios, indica la negociación de futuros.
Los contratos de futuros con vencimiento hasta enero de 2021 rinden menos del 10 por ciento, lo que indica que los operadores apuestan a que las autoridades mantendrán las tasas por debajo de ese umbral, según datos que recopiló Bloomberg. En mayo estimaban que los banqueros centrales llevarían la referencia por encima del 10 por ciento en 2014.
Rousseff, que dijo en abril que es inaceptable que las tasas de interés de Brasil se encuentren entre las más altas del mundo, ha impulsado una reducción de los costos crediticios a los efectos de reanimar el crecimiento de la mayor economía de América Latina y proteger al país de la crisis de la deuda de Europa. La tasa ajustada por inflación de Brasil, que es de 3,51 por ciento, es la más alta entre los países del Grupo de los 20 después de las de China y Rusia. El presidente del banco central, Alexandre Tombini, ha reducido la tasa de 24 horas 4 puntos porcentuales desde agosto, a un bajo nivel récord de 8,5 por ciento.
“Prácticamente se ha llegado a un consenso con el gobierno de Rousseff en el sentido de que este momento de crisis internacional crea una nueva oportunidad para que las autoridades realicen reducciones de tasas más enérgicas”, dijo en entrevista telefónica Joao Augusto de Castro Neves, un analista para Brasil de Eurasia Group en Washington. “Durante la crisis en 2008 y 2009 el banco central empezó a bajar las tasas, pero de forma muy moderada. Ahora el banco central considera que en aquel entonces perdió la oportunidad de reducir las tasas”.
Los rendimientos de los bonos de referencia de Brasil con vencimiento en 2021 han caído desde agosto 182 puntos básicos, o 1,82 puntos porcentuales, a 9,84 por ciento, según datos que recopiló Bloomberg.
Perspectivas de inflación
Los operadores también apuestan a que una desaceleración de la inflación contribuirá a que las autoridades mantengan las tasas por debajo del 10 por ciento. La brecha de rendimiento entre los bonos vinculados a la inflación con vencimiento en 2013 y los futuros de tasas de interés de similar vencimiento, una medición de las estimaciones de los inversores en relación con los aumentos de precios, tocó el 14 de junio un bajo nivel récord de 4,44 puntos porcentuales. La llamada tasa de equilibrio subió a 6,10 por ciento el 14 de marzo debido al temor de que las reducciones de tasas impulsaran la inflación.
La inflación anual que mide el índice de precios IPCA del país se desaceleró a 4,99 por ciento en mayo, el nivel más bajo desde septiembre de 2010. Brasil quiere mantener la inflación en 4,5 por ciento, más o menos 2 puntos porcentuales.
“La economía brasileña sólo será competitiva una vez que nuestras tasas de interés –ya sea para el productor o el consumidor- igualen los niveles del mercado internacional”, dijo Rousseff en un discurso televisado el 30 de abril.
