La mayor desbandada de los bonos venezolanos en dos meses es una señal de comprar para Bank of America y JPMorgan Chase en tanto se diluye la perspectiva de una lucha de poder tras la muerte del presidente Hugo Chávez.
Los pagarés del país sudamericano en dólares perdieron 2,8 por ciento la semana pasada, la mayor caída de los mercados emergentes, por la posibilidad de que el fin de los catorce años de gobierno de Chávez provocaran agitación social. Los rendimientos de los bonos con vencimiento en 2027 treparon a 9,46 por ciento el 7 de marzo, el nivel más alto desde el 5 de diciembre, según los datos que reunió Bloomberg.
Nicolás Maduro, presidente encargado y heredero designado por Chávez, recibió el apoyo del partido gobernante PSUV la semana pasada y las encuestas muestran que probablemente derrote al candidato de la oposición Henrique Capriles Radonski. Los analistas de Bank of America, entre los que se cuenta Francisco Rodríguez, recomendaron ayer que los clientes mantengan “sobrepeso” de bonos venezolanos, explicando que el país avanza hacia una “transición democrática pacífica” luego de que Chávez sucumbiera a una batalla de dos años con el cáncer.
“Antes del deceso de Chávez, los mercados temían que se produjeran graves disturbios sociales y violencia, una lucha intestina destructiva dentro del chavismo o una solución no electoral”, escribieron los analistas de Bank of America en el informe. “Ninguna de estas hipótesis negativas se materializó, lo que eleva las probabilidades de que nos encaminemos a una transición pacífica y ordenada”.
Encuesta sobre las elecciones
Los bonos venezolanos tuvieron un retorno de 47 por ciento el año pasado en tanto el deterioro de la salud de Chávez dio lugar a versiones de que sus políticas económicas serían moderadas por su sucesor. Desde su llegada al poder en 1999, Chávez expropió más de mil compañías, impuso precios máximos a los productos de consumo y restringió las compras de moneda extranjera, lo que llevó al tercer índice de inflación más alto del mundo y a faltantes de todo tipo de productos, desde pasta dentífrica hasta carne vacuna, en un país que posee las reservas de petróleo más grandes del mundo.
Maduro probablemente gane las elecciones del 14 de abril con el 46 por ciento de los votos, frente a un 34 por ciento para Capriles, según un sondeo de Datanalisis realizado entre el 31 de enero y el 20 de febrero. El margen de error de la encuesta es de 2,4 puntos porcentuales.
Maduro, ex dirigente sindical y conductor de autobuses de 50 años, es el líder de facto desde diciembre, cuando Chávez lo designó como su sucesor antes de viajar a Cuba para someterse a cirugía por el cáncer. Aunque ha prometido mantener las políticas de Chávez de redistribución de la riqueza y ampliación del papel del Estado en la economía, Maduro ha dado señales de ser un pragmático a la hora de hacer frente a los desafíos económicos, entre los que figuran una moneda sobrevaluada y el déficit fiscal, según JPMorgan.
