Destacado
En el libro, Ivanka da consejos sobre cómo lograr combinar bien la vida personal y profesional, mientras revela detalles de su experiencia personal.
Ivanka Trump es una de las mujeres más influyentes del último tiempo. Pasó de ser modelo, empresaria e hija de un multimillonario ha ser una de las asesoras más cercanas de su padre, el Presidente de Estados Unidos.
Y ella se ha tomado su nuevo rol en serio. Además de representar a su país, busca consolidarse en las discusiones de género y promover el derecho de las mujeres. Ya lo hizo en la cumbre W20 en Alemania. Ahora, publicó su segundo libro para visibilizar cómo las las mujeres deben conjugar el ámbito profesional y familiar.
En las 243 páginas de Women Who Work: Rewriting the Rules for Success (Mujeres en el Trabajo: Reescribiendo las Reglas del Éxito) se ve la importancia de los valores familiares, ofrece consejos para mujeres sobre liderazgo en el ámbito laboral y muestra al lector detalles de su vida privada para lograr el éxito. Para evitar conflictos, lo recaudado por la venta del libro irá a obras de caridad.
Además, el libro está repleto de referencias a otras mujeres exitosas, como la famosa presentadora de TV Oprah Winfrey, la directora de operaciones de Facebook, Sheryl Sandberg o la gurú de la moda Anna Wintour. Incluso menciona a Umber Ahmad, hija de inmigrantes paquistaníes que lanzó en Nueva York una exitosa confitería tras haber sido banquera.
Vida personal
Ivanka relata algunas experiencias que la formaron, tanto recientes como antiguas. “Durante los momentos de mayor trabajo, como durante la campaña, me adentro en el modo supervivencia: trabajaba y pasaba tiempo con mi familia; nada más. Sinceramente, no me concedía el lujo de darme un masaje u otros cuidados personales”, señaló la revista Fortune.
También rinde homenaje a su madre checa, Ivana, primera mujer de Donald Trump, que le enseñó a encarnar a «la mujer multidimensional», capaz de inspeccionar «meticulosamente» la construcción de un nuevo hotel «en tacos aguja» cuando las mujeres en el sector inmobiliario eran una rareza.
Aunque busca identificarse con mujeres trabajadoras, los ejemplos que da reflejan su vida de millonaria: cuenta cómo su hija llegaba cada miércoles para almorzar con ella en su oficina de la Trump Tower, que queda al lado de su residencia de Park Avenue. En su oficina, la niña tenía un escritorio especialmente instalado para ella con «golosinas, juguetes, lápices de colores».
Eso sí, ha tenido algunos conflictos, como las dudas sobre la exposición de su familia en las redes sociales, lo cual hoy utiliza para promover su nuevo perfil: temía sobre todo perder «autoridad a ojos de colegas y pares, en un sector dominado por los hombres».
La asesora presidencial asegura que ha defendido la causa femenina en la empresa que creó, autorizando un uso flexible del tiempo de trabajo, «dando el ejemplo» al llevar a sus hijos a la oficina o partiendo temprano para irlos a buscar a la escuela.
Ivanka, que presionó a su padre para que durante la campaña prometiera instaurar por primera vez en Estados Unidos la licencia maternal pagada y ayuda financiera para el cuidado de los niños, retorna brevemente sobre este tema al final del libro.
«Debemos luchar para que esto cambie, vía la legislación o en las empresas», escribe sin dar más precisiones.
Incluso sin revuelo publicitario el libro podría cosechar un gran éxito debido al interés que suscita la «Primera Hija». Su primer libro, publicado en 2009, ya fue un éxito de ventas.
