Mujeres
Sin querer, la actriz se transformó en una de las embajadoras del movimiento que pide evitar la censura de los pezones femeninos. Además, en entrevista con Revista Vogue criticó la obsesión que hay por juzgar el cuerpo de las famosas.
Cuando Jennifer Aniston interpretó a Rachel en la recordada serie Friends en la década de los 90s e inicios del 2000, nunca imagino que impondría estilo tanto en la moda, en los cortes de cabello y hasta en que sus pezones darían que hablar.
En una entrevista a la revista Vogue, la actriz habló de cómo sin querer se transformó en una embajadora mucho antes de que existiera siquiera el movimiento #FreeTheNipple (Liberen los Pezones) que busca evitar la censura de los pezones femeninos, por ejemplo, en redes sociales como Facebook o Instagram.
«No sé por qué se supone que debemos avergonzarnos de ellos, ¡es sólo la forma de mis pechos!», dijo. «Uso sostén, ¡así que no sé qué decirte!», agregó y aprovechó la publicación para hacer un reclamo contra los paparazzis que la persiguen en sus vacaciones y las crueles críticas que hace la prensa sobre la figura de las mujeres: «Si vas a salir mostrando tus pezones, o tu panza está un poco hinchada, o no estás en el peso que quisieras, eres perfecto, sin importar lo que seas ni dónde te encuentres y… ¡A quien le importa! Tienes que desconectarte del ruido […], solo sé que estoy feliz y sana y haciendo todo lo posible para ser buena en el mundo y con la gente con la que trabajo. Pero es difícil. La gente es adicta a esas historias. Tal vez (las revistas de farándula) mueran algún día. ¿Quién pensó que Donald Trump sería el Presidente de los Estados Unidos? Yo no», señaló.
Aniston, de 48 años actualmente y casada con el actor Justin Theroux, también sostuvo que está cansada de que los medios especulen sobre si está o no embarazada cada vez que tiene un poco de barriga. «He trabajado demasiado duro en esta vida y en esta carrera como para ser reducida a un persona triste, sin hijos», aseguró. Y agregó: «Yo ya no podía escuchar nada más sobre si estaba o no embarazada. No tiene idea de lo que nos pasa en la intimidad. Ahora cambié de perspectiva, así que ¿qué mierda me importa?».
La actriz también hizo un llamado a la sociedad actual porque «no podemos estar enseñándole esto a las mujeres jóvenes. Esto tiene que parar. Es una obsesión extraña que la gente tiene [señalar los defectos del otro] y no entiendo exactamente por qué necesitan ensañarse contras las personas que están para entretenerlos, y desgarrarlos e intimidarlos (…)».
