La imagen del día en Braga corresponde a las polémicas declaraciones de Kim Cattrall por la cancelación abrupta de la tercera parte de Sex and The City. “No he matado a Samantha, solo la he dejado marchar”, dijo la actriz en una entrevista con el programa británico Life Stories. “Esto es lo maravilloso de tener 61 años, que puedo cerrar ese capítulo y hacer solo lo que realmente quiero hacer. Creo que la serie tuvo su momento y las dos películas fueron un bonus. Así que hoy vuelvo a repetir y a jurar que no voy a volver a interpretar a Samantha nunca. Se acabó, y de verdad que lo hago sin ningún resentimiento”.
Quien interpreta a Samantha Jones además se refirió a su relación con Sarah Jessica Parker, Cynthia Nixon y Kristin Davis , donde aseguró que no eran muy cercanas. «Nunca fuimos amigas. Éramos colegas y creo que de alguna manera era bastante sano, porque así se tiene muy clara la línea entre tu vida profesional y personal», sostuvo.
La intérprete recalcó que había una diferencia de edad importante con el resto de sus compañeras. «El único lugar en común que teníamos era la serie y la serie ya terminó», señaló.
Pero eso no fue todo. Cattrall también contó como el programa afectó la posibilidad de tener hijos: «Cuando comencé a rodar contemplé la posibilidad de someterme a un proceso de fertilización in vitro», explicó, aunque nunca tuvo tiempo de hacerlo.
«Acababa de cumplir 40 años y también comencé a grabar la serie, y aunque podría haberme quedado embarazada, pensé: ¡Wow! Le dedico 19 horas diarias a la serie, hay fines de semanas en donde terminó de grabar en la madrugada del sábado, mis mañanas de lunes comienzan a las 4:45 de la mañana y a veces estoy hasta las 2 de la madrugada. ¿Cómo voy a poder continuar haciendo eso?», dijo
Aunque nadie en HBO le prohibió tener hijos -la quinta temporada de la serie solo tuvo ocho capítulos porque Sarah Jessica Parker quedó embarazada- Kim tomó esa decisión para no perjudicar su carrera, pero ahora se arrepiente.
“Creo que el instinto maternal es algo que todas las mujeres tenemos, pero obviamente el destino, el tiempo, la suerte y el destino no permiten que todas lo seamos”, confesó. “Por eso ahora me preocupo mucho de ser una mentora de jóvenes actrices con las que trabajo. No quiero ser su madre biológica, pero esto me permite ser una mezcla de madre, tía y amiga que me está devolviendo mucho más de lo que yo doy”.
