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Venus, la sexualidad femenina hecha documental: «El placer de nosotras está aún en un segundo plano»

Venus, la sexualidad femenina hecha documental: «El placer de nosotras está aún en un segundo plano»

Dos directoras grabaron a más de 100 mujeres que hablaron sinceramente del deseo, las emociones, los descubrimientos, el rol que se espera en la cama y todas aquellas cosas de las que nunca nos atrevemos a hablar.


«Vivimos en una sociedad donde se respira la tensión que supone la exigencia de ser a la vez sexy y femenina, ser inocente y al mismo tiempo un animal salvaje». Testimonios como estos son los que se pueden ver en el documental Venus, de las danesas Lea Glob y Mette Carla Albrechtsen y que se está exhibiendo como parte del festival DocsBarcelona del Mes directo a las salas de todo el país.

Venus hace una reflexión acerca de la sexualidad real de las mujeres, desde una perspectiva feminista y libre de estereotipos. Diferentes miradas y maneras de vivir la sexualidad son narradas en una historia sincera, honesta e incluso vulnerable.

Las dos jóvenes directoras convocaron un casting como parte del proceso para filmar una película erótica dirigida por y para mujeres. Más de 100 mujeres llegaron a su departamento y hablaron directamente a cámara sobre sus fantasías eróticas, sus deseos y sus frustraciones. A medida que avanzaba el rodaje, las entrevistadas se abrían más y la trama fue tomando forma. Sin haberlo previsto, estas sesiones íntimas se convirtieron en la película que necesitaban hacer.

Lea Glob y Mette Carla Albrechtsen

Mette Carla Albrechtsen contó a El Mostrador Braga parte de su motivación personal para hacer el filme: «Proviene de crecer como medio marimacho y ser muy tímida con las relaciones íntimas. Simplemente no podía entender cómo ser una chica ‘real’. No sabía que estaba bien ser solo yo, me tomó mucho tiempo sentirme cómoda con mi sexualidad y darme cuenta de que estaba bien. Quería ayudar a otras chicas señalando las diferencias estructurales, lo que lleva a las jóvenes a tener baja autoestima en la sociedad y les presto las palabras para comenzar a hablar. Venus es la película que desearía haber visto cuando tenía 13-14 años y comenzar a pensar en quién soy como ser sexual».

Ella comenta cómo vio un proceso gradual también en las mujeres que participaron en la película, que estaban pudorosas en un principio, pero terminaron en el escenario aceptando el aplauso y el respeto durante el estreno.

«Nos aseguramos de crear un espacio seguro. También compartimos algunas historias personales de nuestra propia vida. Habíamos pasado por un proceso prolongado de grabarnos antes, documentando pensamientos y experiencias eróticas personales, así que sabíamos lo que les pedíamos a las chicas», señala la directora. «También les hablamos sobre la creación de un coro femenino colectivo donde cada voz era necesaria para demostrar el objetivo de la película».

Algunas historias son muy conmovedoras. Mette Carla sabía que tenían que mantener el ambiente en las historias más difíciles  y también en las más fogosas. «Sin importar la historia o la chica, teníamos que ser fuertes por ellas, porque era difícil sentarse en esa silla contando estas historias en cámara», recuerda.

A veces lloraba. «Fue muy intenso y tardó un tiempo en calmarse después de escuchar estas grandes historias, pero también sentí mucha pena».

– ¿Como reaccionó el público? ¿Y los hombres?

– Fue muy positivo por parte del público. Honestamente, no he recibido ningún comentario mezquino o una crítica seria. Algunos hombres pueden reaccionar graciosamente, como si se sintieran engañados cuando ven la película. Creo que esperan ser excitados y liberados de alguna manera y, en lugar de eso, lo único que consiguen es la honestidad y la vulnerabilidad mezcladas con historias de deseo, lujuria y tristeza. El padre con las hijas parece muy conmovido por la película, y algunas de ellas nos han agradecido profundamente por darles este conocimiento interno.

– ¿Cuál fue el enfoque femenino específico de Venus?

– Creo que fue personal y desde un punto de vista visual. No establecimos ninguna teoría periodística o ciencia o ideales democráticos. Salimos de nosotras mismas y de nuestra propia curiosidad incómoda, en busca de imágenes u otras mujeres en las que pudiéramos vernos a nosotros mismos.

Sexualidad femenina al descubierto

La sexóloga Josefina Lazcano es la encargada del conversatorio después de la proyección del documental. Ella es quien comenta sobre la sexualidad femenina desde la visión de una sexóloga poniendo como ejemplo el documental y el conversatorio que hubo.

– ¿Qué se descubre de la sexualidad femenina moderna en esta película? 

– Se descubre que somos todas diferentes y muy parecidas a la vez. Que nuestros miedos, incertidumbres, deseos, necesidades, son prácticamente las mismas viniendo de culturas muy distintas. Se descubre que la mujer tiene una voz muy fuerte en lo que a su sexualidad se refiere, que tiene ganas de ser feliz en este ámbito, ganas de conocerse y darse a conocer; ganas de amar y sentirse amada; y que hay un tema muy grande con el autoestima y autoimagen que influye directamente en nuestra sexualidad.

– Que las mujeres hablen abiertamente de sexo es tabú o mal mirado por parte de la sociedad, pero con esta película se ve que las mujeres no sólo quieren hablar, sino que tienen mucho que decir 

– Yo no creo que hoy en día, el que una mujer hable de sexo abiertamente sea molesto, creo que son cada vez menos los que lo ven desde un tabú, y es más, creo que para muchos hombres sí resulta tremendamente atractivo conocer este tema desde nosotras mismas. La mujer siempre ha tenido mucho que decir respecto a la sexualidad, como todos, ¿no? El tope tal vez ha estado en no tener los espacios para hacerlo y esta película brinda e invita al diálogo, a la apertura, a exponerse en un espacio libre de juicios, abordando las sexualidades desde la naturalidad.

Una sexualidad, como la femenina, que siempre ha estado al servicio de otro, pierde su autenticidad. Es difícil conocer cuál es Mi deseo si se me ha enseñado -desde la educación, religión, publicidad, cultura en general- siempre a que éste depende del deseo de otro, de otros. Es por esto que se abren muchas conversaciones interesantes a partir de toda la información que nos regalan estas mujeres, que se atreven a decir lo que muchas de nosotras nunca nos hemos atrevido. ¡Y eso es maravilloso! Se habla de sexo, de amor, de seducción, de cuerpo y desnudez, de fantasías, de control… en fin. Todo un mundo.

– ¿Qué se descubre en estos testimonios?

– No sé si es algo que se descubra, pero sí se abren muchos temas. La necesidad del autoconocimiento, temas de lenguaje… de no saber ni cómo nombrar los genitales propios, las inseguridades de cada una y de todas a la vez. Es una película que sí o sí te hará identificarte por lo menos con alguna de sus historias, de sus testimonios, aún cuando sea una realidad diferente, una orientación distinta a la tuya o una opción de vida completamente alejada de la de uno. Descubres que la sexualidad femenina sigue muy relacionada a las necesidades masculinas, que el placer de nosotras está aún (aunque se ha avanzado bastante en ello) en un segundo plano (por ellos y por nosotras mismas) y que debemos trabajar en esto con urgencia.

– ¿Que es lo universal que se ve en estos testimonios de la sexualidad femenina?

Se ve que por lo menos en una cultura occidental, las necesidades, deseos y miedos son bastante parecidos. Aún cuando los enfrentemos de distintas maneras. Se ve que la necesidad de “encajar” con lo “esperado” socialmente se da en todos lados, o por lo menos en estas culturas. Que la tensión existente entre el ser sexy o femenina; entre ser inocente o animal salvaje, aún está en el “o” y tenemos que trabajar para que se transforme en un “y”, un equilibrio, una integración entre ambos.

Aparece también la eterna pregunta de si el sexo y el amor van unidos, si es que pueden ir unidos, o si es que pueden estar separados. Esta pregunta nos la hacemos también por aquí, continuamente, respecto al deseo, a nuestros instintos, al cómo nos relacionamos, a las expectativas de una relación, entre tantas cosas más que se derivan de ella.

– ¿Por qué los hombres deberían ver el documental?

– Los hombres debieran ver el documental primero porque es entretenido, está bien hecho, es interesante y fluido. Para aprender de nosotras, sobre todo por eso. Para ser mejores amantes, para saber preguntar más y entender un poquito cómo funcionamos.  Para hablar del tema con sus pares, para abrir conversaciones con amigos y amigas; para entender que somos todas diferentes y que nuestras necesidades también son distintas, para comprender que una sexualidad más equitativa también es una sexualidad más sana y placentera para ambos.

Las funciones que quedan de este documental son este 29 de noviembre en Panguipulli y al día siguiente en Santiago, Valdivia y Puerto Varas. Mas información en www.docsbarcelonavalparaiso.com

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