La Imagen del Día Braga viene de nuestras colegas de Mujeres Bacanas, quienes destacan que Jane Fonda cumplió hace dos días 80 años, una mujer en plena vigencia, con la exitosa serie Grace y Frankie en Netflix, donde junto a su amiga Lily Tomlin forman un dúo dispar y divertidísimo, que relata los avatares de dos mujeres que ya se empinan en los 70 años y se acaban de separar tras enterarse que sus esposos eran amantes desde hace dos décadas.
«Ochenta años y un (dos) día(s) tiene Jane Fonda. Una mujer tan multifacética que se llegó a transformar en un ícono, desde símbolo sexual hasta activista política. Jane Fonda las hace todas porque habita lejos del temor a los estereotipos», comienza la publicación en el Instagram @mujeresbacanas. Es que parece que Jane hubiera vivido varias vidas en una y por eso la amamos.
Hija de una leyenda del cine, Henry Fonda, la actriz nacida en Nueva York el 21 de diciembre de 1937, tuvo una infancia muy difícil. Su madre, recluida en una clínica psiquiátrica, se suicidó cuando Jane tenía apenas 12 años. Pero a esa tragedia se le sumó otra. Su padre, por entonces ya famoso, decidió ocultarles la verdad a sus hijos y les dijo que había muerto de un ataque al corazón. Más tarde, Jane descubrió la verdad leyendo una revista y fue traumático. A partir de ahí, la relación con su padre fue siempre muy complicada. Más tarde se sumaría el hecho de compartir la misma profesión con las inevitables comparaciones.
En su autobiografía, Jane contó más situaciones dramáticas que la marcaron: una violación siendo adolescente y problemas con la alimentación que derivaron en bulimia. Cuando decidió ser actriz, fue a estudiar al famoso Actor’s Studio donde compartió clases con Marlon Brando y Paul Newman. En 1960 debutó en Broadway.
«Fue con su personaje de Barbarella en la película de ciencia ficción de RogerVadim (1968) que se alzó como ícono sexual al mismo tiempo que su actuación en la cinta They Shoot Horses, Don’t They?, de Sydney Pollack, le valió una excelente crítica y su primera nominación al premio Óscar. Su rol en Klute de Alan J. Pakula (1971) terminó de consagrarla como actriz de carácter», dicen nuestras amigas. En término personales, Jane se casó con Vadim y tuvo a una hiija, Vanessa.
«En esa época, Fonda también destacó como activista política por el rol que tomó en contra de la guerra de Vietnam, incluso viajó a Hanoi en medio del conflicto para manifestar su posición pacifista (de lo cual ha dicho luego haberse arrepentido). Más adelante asumió con entusiasmo otras causas ecologistas y también feministas», cuentan en Mujeres Bacanas.
Y agregan: «En los años ochenta vistió calzas e invitó a las dueñas de casas a ejercitarse en sus hogares siguiendo sus famosos videos de aerobics. Como empresaria fundó su propia compañía de cine, IPC Films, con la cual produjo una serie de películas de éxito internacional. En su carrera como actriz además ha ganado dos premios Óscar (de siete nominaciones), cuatro Globos de Oro, dos premios BAFTA y un premio Emmy».
Claro que Jane ha tenido siempre tiempo para el amor. Con el político Tom Hayden mantuvo una relación durante 15 años y tuvo a su segundo hijo, Troy. Su tercer marido fue el magnate de los medios Ted Turner, dueño de la CNN, con quien estuvo diez años.
En 1991 anunció su retiro de la industria pero volvió al cine en 2005, mismo año en que lanzó su libro autobiografico, My Life So Far.
Varias veces, Fonda se refirió de manera crítica a las presiones que reciben las mujeres, especialmente las actrices, por lucir eternamente jóvenes y hermosas. Y declaró que sólo se realizó una cirugía estética en su vida. «El resto se lo debo a la genética, los ejercicios y al buen sexo», declaró haciendo gala de su sentido del humor.
Ahora, recién separada de su última relación con el productor musical Richard Perry, su causa más fuerte es la de recaudar fondos para la prevención de embarazos no deseados entre adolescentes.
Con más ímpetu que nunca, Jane está enfocada en sus nuevos trabajos: la serie Grace y Frankie y la película Our souls at night, donde vuelve a vivir un romance de ficción junto a Robert Redford, como lo hicieron cincuenta años atrás en la exitosa Descalzos en el Parque.
Sobreviviente a un cáncer de mama, Fonda siempre se destacó por ser una luchadora y decir las cosas de frente, lo que le valió muchas críticas. Libre y rebelde, Jane Fonda es una mujer que supo reinventarse siempre.
