BRAGA
La abogada y ex fiscal federal de 56 años, no sólo marcó un hito por ser la primera mujer negra que gana la alcaldía en Chicago, sino que también, es la primera regidora que se reconoce abiertamente como «una lesbiana orgullosa». “Están viendo cómo renace una ciudad. Una ciudad en la que no importa de qué color seas (…). Donde no importa a quién amas, siempre y cuando ames con todo tu corazón”, anunció Lightfoot ante la multitud de seguidores.
Considerando los resultados de más del 70% de los distritos electorales, Lori Lightfoot logró derrotar con un 74.2% a su contrincante -también afroamericana- Toni Preckwinkle, quien obtuvo un 25.8% de los votos.
«Juntos pondremos los intereses de toda nuestra gente por encima de los intereses de unos pocos poderosos», anunció Lightfoot en su discurso de victoria junto a su esposa e hija.
«Hoy, ustedes hicieron más que historia, crearon un movimiento para el cambio», aseguró la ex vicefiscal de Estados Unidos ante la multitud.
Sin embargo, para la cientista política el camino hasta la victoria no fue nada fácil. Lightfoot, quien se describe a sí misma como “una lesbiana negra orgullosa”, debió enfrentar duras críticas por parte de los sectores más conservadores durante su campaña.
No sólo fue cuestionada por su orientación sexual, sino que también, por su falta de experiencia para enfrentar los grandes desafíos políticos que caracterizan a Chicago, especialmente por casos de violencia y corrupción.
A pesar de los obstáculos, logró hacer historia en una ciudad que desde 1987, sólo ha tenido un alcalde afroamericano. “Esta noche, muchas niñas y niños nos miran. Nos están mirando. Y están viendo el comienzo de algo, bueno, un poco diferente”, dijo a la multitud con una sonrisa irónica.
“Están viendo cómo renace una ciudad. Una ciudad en la que no importa de qué color seas”, continuó. “Donde no importa a quién amas, siempre y cuando ames con todo tu corazón”.
Algunas de sus propuestas
Durante su campaña electoral, priorizó la necesidad de combatir la violencia armada que enfrenta Chicago, la tercera ciudad más poblada de Estados Unidos y con mayor índice de criminalidad del país.
Lightfoot también prometió transparencia en la administración del ayuntamiento, con el objetivo de «recuperar la confianza de los ciudadanos», ya que según un estudio de la Universidad de Illinois, Chicago es la ciudad más corrupta del país.
