BRAGA
El 43% de los encuestados señaló controlar a sus parejas con hostigamientos para saber «todo lo que hacían y con quién estaban», mientras que el 51% aseguró ser testigo de amistades que sufren de maltrato en el pololeo. Frente a esta realidad, la directora del Instituto de la Mujer, Gloria Leal, aseguró que «si seguimos avanzando simplemente en la atención y no la prevención de la violencia de género, no lograremos erradicarla».
La Fundación Instituto de la Mujer dio a conocer los resultados de un nuevo estudio llamado «Amores tempranos: Violencia en los pololeos en adolescentes y jóvenes en Chile», el cual fue aplicado a 2.080 personas entre 12 y 29 años.
La investigación enmarcada en el proyecto «Por una vida libre de violencia en el noviazgo para las y los adolescentes y jóvenes en Chile”, reveló que el 43,4% de los encuestados habría querido saber todo lo que hacía su pareja y con quién estaba, a través de hostigamientos con mensajes o llamadas constantes.
El 28,7% señaló haber experimentado que su pareja les dijera con quién deben salir y juntarse, mientras que un 51,2% aseguró conocer a una amistad que ha sufrido maltrato en un pololeo.
El estudio también dejó en evidencia los estereotipos y roles de género presentes en la percepción de las y los jóvenes, ya que, para la mitad de los encuestados «el lugar de una mujer» es en su casa o con su familia. Asimismo, 3 de cada 4 cree que ellas son insustituibles en el hogar.
En relación al control mediante las redes sociales, el estudio identificó que 3 de cada 1o adolescentes considera «poco grave» que la pareja les exija las claves o revisar el email.
Frente a las preocupantes cifras, la directora ejecutiva de Fundación Instituto de la Mujer, Gloria Leal, afirmó que esta investigación permitió «establecer una línea de base para proyectar estrategias de trabajo desde el Estado y la sociedad, y así avanzar en la prevención y sensibilización frente a estas tempranas y cotidianas violencias”.
La toxicidad del «amor romántico»
Con los resultados obtenidos, desde la Fundación señalaron que la investigación muestra relaciones de pareja marcadas por prácticas estereotipadas y jerarquizadas.
En este sentido, se hace presente el concepto del «amor romántico», basado en representaciones sociales y conductas sexistas, las cuales reproducen la desigualdad y la subordinación de acuerdo a los roles de género asentados culturalmente.
Bajo este contexto, Leal enfatizó en la necesidad de impulsar programas que apunten a detectar los riesgos de forma temprana. «Si seguimos avanzando, simplemente, en la atención y no la prevención de la violencia de género, no lograremos erradicarla», expresó.
La directora también explicó que «si bien el Estado ha ratificado y suscrito acuerdos respecto de la violencia hacia las mujeres, en Chile la prevención ha sido insuficiente y no se ha focalizado en la población adolescente y joven, momento donde comienzan las relaciones de pareja abusivas y violentas».
